Rio Cotas - Arma
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Por: Ferrer Maizondo Saldaña - Doctor en Educación
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En los pueblos de Castrovirreyna y Huaytará, las aguas están movidas, inquietas. No solo se trata de la temporada de lluvias.
El agua está de moda, preocupación e inquietud. Como toda riqueza es apetecida y ambicionada por los grandes empresarios, esta vez los agroexportadores costeños que andan angustiados por atender sus mercados internacionales. No interesa o interesa muy poco que los pueblos huancavelicanos proveedores de elemental líquido también los necesitan para sus pequeñas y medianas parcelas. El afán es cómo regar las grandes parcelas de Chincha, Pisco e Ica.
Para el recién elegido Presidente Regional de Ica, Fernando Cilloniz, con su gestión, pronto, muy pronto, todo será digno de admiración, de asombro, extraordinario en el Sur Chico.
Es frase reiterada de su columna semanal: “Ya viene la autopista entre Chincha e Ica. Ya vienen el puerto y el aeropuerto de Pisco. Y –lo más importante de todo– ya viene el agua grande para Ica y Villacurí. ¡Maravilloso!”. Declara con mucho entusiasmo que “Ica y Huancavelica son hermanos del agua”.
Y, como se trata de hermanos construirán reservorios de agua en territorio huancavelicano. Debería alegrarnos, si de obras se trata. Sólo que hay un mal precedente con este tipo de obras. El uso del agua de la laguna Choclococha, Proyecto Especial Tambo Ccaracocha (PETAC), situada entre los distritos de Santa Ana y Pilpichaca, en las provincias de Castrovirreyna y Huaytará, respectivamente, genera gran beneficio a los agricultores costeños; los andinos solo ven pasar sus aguas, ni los animales pueden beber en sus canales.
No estamos en contra que los hermanos de Ica utilicen el agua que baja de los andes. Al contrario, apostamos porque se utilice, pero que se utilice adecuadamente, con solidaridad. El agua es para compartir no para acaparar. Que no se desperdicie en el mar, ni solo sirva para los grandes y nuevos latifundios. Que el agua riegue los campos del pequeño, mediano y gran agricultor de ambas regiones: Ica y Huancavelica. Agua debidamente utiliza permitirá el desarrollo integral, armónico y sostenible. Que el agua sirva de bebida diaria, no contaminada, de hombres y animales de los pueblos, valles, asentamientos y ciudades.
La Junta de Usuario de Agua de Pisco está mortificado porque temen que el agua del río Pisco sea desviada para Lanchas y Villacurí. Piden “igualdad y justicia para atender las necesidades hídricas” del valle.
Como vemos, el río está que suena, seguro que piedras trae. Pero también viene nutrientes. Sustancias provechosas. Una de ellas y digno de resaltar es la reunión y coordinación de autoridades, líderes comunales y ciudadanos interesados preocupados en el progreso de nuestros pueblos. Espero no sean jugadas o poses electoreras
Razón por la que saludamos el Encuentro de Alcaldes de Castrovirreyna en el acogedor distrito de Tantará, tierra de mi recordada y adorada madre: Olga Saldaña Cárdenas.