|
---|
El connotado científico chinchano de origen chavinero fue premiado en Suiza con medalla de oro por su aporte científico a favor de la humanidad. Premio que se concede a investigadores de talla mundial, ante cientos de trabajos que se presentan con ese fin, a los científicos de todo el mundo.
El máximo galardón conseguido por Bruno Castillón Lévano, hijo de ex alcalde de Chavín Claudio Antonio Castillón Quispe, es un ejemplo para los estudiantes en forma general, y un orgullo para la provincia de Chincha
Bruno Castillón Lévano estudio primaria en el colegio Nacional Pardo y secundaria en el colegio Nacional Industrial No. 20 de Chincha. Desde pequeño se destacó en el campo de la investigación. Su historia es larga. Tuvo que estudiar compartiendo su tiempo con las tareas escolares y el trabajo. Terminando su secundaria fue en busca de trabajo hacia Cajamarca, Jaén. En el camino tuvo que vender su libro de Baldor, para proseguir su ruta.
Estando en Cajamarca siguió estudios de enfermería, pero dedicándose a las labores de electricidad y radiotécnicas, para solventar sus estudios, conocimientos aprendidos en Chincha. Mientras hacía sus prácticas de enfermería fue testigo de la muerte de un neonato, que quedó grabado en su mente, porque no pudo salvarle la vida. Entonces le quedó un reto de hacer algo para que los niños de esa edad no sigan muriendo.
Es entonces cuando se proyecta a investigar y tratar de resolver el problema. Llega con sus proyectos debajo de sus brazos a Lima, tocando las puertas para ser escuchado. Muchas instituciones les cerraron las puertas, porque en ese tiempo Bruno era solo Bachiller en Enfermería.
Entonces decepcionado caminaba con su proyecto, y propone hacer el último intento. Es cuando llega a la PUCP. Allí se pone en contacto con profesionales que tenían una visión científica y Bruno Castillón Lévano es asimilado. En poco tiempo se convierte en jefe del equipo Biomédico de la Universidad, y su proyecto de construcción de aparatos para salvar vida de los neonatos se puso en marcha. Después de algún tiempo su proyecto se destacó y se construyó el primer equipo para salvar vidas de neonatos, modelo peruano.
Este modelo tuvo el privilegio de ser patentado en EE-UU y otros lugares. Un éxito para el peruano y de quienes trabajan con él en la PUCP. El científico hace más de 10 años viene recorriendo el mundo dando conferencias en diversas partes del mundo. Hace algunos años lo invitaron a Venezuela, en ese lugar el gobierno les confirió 5 anfitrionas. Increíble, pero cierto. La paradoja, aquí en Chincha, y en su tierra que es Chavín, pasa desapercibido, cuando en el mundo es galardonado, y con anfitrionas al costado..
Bruno Castillón Lévano es un científico tan humilde, fiel a sus ancestros, a pesar de tantos premios y reconocimientos que posee demuestra su modestia y sencillez. Muy pronto estará en Chavín recordando su infancia y observar la tierra de sus padres que está ubicado en el pequeño valle del anexo de San Florián, donde hace muchos años estuvo el niño Jesús, después de ser hallado en Chavín.
Recibe las últimas noticias del día