ICA - La presencia del Contralor General de la República, Fuad Khoury Zarzar, ayer en la ciudad de Ica, probablemente constituye un acto de reivindicación institucional que le pesa a la Contraloría en favor de la población de Ica, probablemente desde el terremoto del 2007, cuando se hizo evidente  la dramática fragilidad  de la conducta ética de algunos funcionarios públicos del nivel regional y municipal, quienes se aprovecharon de la desgracia para lucrar y que hasta ahora no han sido sancionados.

Dicha institución gubernamental no ha tenido logros eficaces que pueda exhibir de manera contundente a favor de la moral pública del país, menos  para cumplir con la finalidad de prevenir la comisión de delitos cometidos por servidores públicos, en la ejecución de los proyectos de inversión pública y en la administración de los recursos públicos.

Ante un raleado auditorio convocado en el Gobierno Regional de Ica, donde no estuvo presente el Alcalde de Ica, Carlos Ramos Loayza, ni la mayoría de alcaldes distritales, Fernando Cillóniz y Khoury Zarzar compartieron la mesa desde donde el Contralor expuso sobre "La lucha contra la corrupción a nivel regional y local" y "Retos y vulnerabilidades de la Región Ica en materia de control".

Como acto final, el Presidente Regional y el Contralor General  firmaron el documento "Pacto por la Integridad", donde la Contraloría, según el documento, constituye "parte de su estrategia de prevención y lucha contra la corrupción", mientras que el GORE Ica "se compromete con la promoción de una gestión pública integral".

La lucha contra la corrupción no puede ser lo único que se haga, puesto que el problema  de la cosa pública y del servidor público pasa por la capacitación y la reingeniería para el cambio de actitud del tradicional empleado reacio a los nuevos tiempos. A ello debe sumarse  los sueldos acordes al esfuerzo y compromiso que asuman con el cumplimiento de objetivos regionales.

Es evidente que la gestión pública dista mucho de ser transparente y legal como práctica. Más aún, cuando los intereses económicos tienen un componente de atención de compromiso político. La Contraloría no ha sido capaz de prevenir y erradicar las malas prácticas gubernamentales, por la formación rígida y la especialidad en el "control posterior" de las acciones de control que la caracterizan, cuando el presunto delito se consumó y el daño a las ilusiones de la población se realizó.

Por ejemplo, de oficio la Contraloría ha debido de intervenir frente al ilegal aumento de remuneraciones del Presidente, Vicepresidente Regional, y dietas de los Consejeros Regionales, los cuales violentan de manera evidente la Ley del Presupuesto de la República.

Si a esto le sumamos el tema de los sueldos a los Gerentes, calificados como planillas doradas, también constituyen actos que dañan la conducta pública de los funcionarios que propiciaron y avalaron tales sueldos.

Por tanto, las declaraciones contenidas en el llamado "Pacto por la Integridad" suscrito por Fuad Khoury Zarzar  y Fernando Cillóniz Benavides, es un documento de buenas intenciones hartamente conocido como estrategia de marketing institucional.

En la lucha contra la corrupción importa satisfacer realmente los verdaderos problemas de la sociedad, porque la prioridad la tienen los ciudadanos de a pie que diariamente sufren las consecuencias de la falta de  capacidad técnica en la elaboración de proyectos de inversión, los mismos que no satisfacen las necesidades colectivas. (Fuente: Daniel Bravo Dextre LA VOZ DE ICA)

COPIA DEL PACTO POR LA INTEGRIDAD