Por: Eucadio Gutiérrez Solano - Profesor/Periodista

La historia se repite cada cierto tiempo, llamado ciclo histórico. Piura será hoy escenario de la definición entre el bien y el mal; entre la soberanía y la dependencia; entre la dictadura y la corrupción frente a la honestidad e imperio de la justicia. Lo demás es puro cuento, demagogia y politicastro.

Hace 500 años Piura fue puerta de entrada para que los conquistadores criminales se dirijan a Cajamarca y maten a Atahualpa, guiados por felipillos y traidores, que sin espíritu de identidad complacientes con la llegada de los españoles, previa chicha  y dádivas, escoltaron a los puercos y pastores de chancos, llevándolos por los senderos más propicios, para asesinar a sus hermanos.

Hoy se verá si esta historia de traición se repite.

Dos candidatos se pondrán frente a frente como el ejército de los sátrapas españoles y el bando de Atahualpa, siendo escenario Piura, lugar que es un templo superior del saber. Veremos si los piuranos tienen dignidad e identidad para escoger el bien, o comportarse con la época de la conquista en que recibieron con vítores y chicha a los foráneos que vinieron a matar y despojar de sus bienes, y llevarse los tesoros del Perú.

Dos candidatos que se sentarán frente a frente, como se ha visto en la guerra sucia sucedido previamente, donde el cinismo y la mentira fueron el edulcorante y pócima para adormecer la mente de tantos incautos y faltos de cerebro.

La ignorancia es el peor lastre que posee la mayoría de los peruanos. Existe una elevada porción de sectarios que no les interesa el Perú sino su propia esclavitud, la sumisión y la inercia; el predominio de la rapiña y el hurto; el silencio y la complicidad; y la ociosidad. Hay mucha gente que pide que el gobierno les dé  todo: alimento y vestimentas. Entonces crecen los siervos y vagos.

Ya están elegidos muchos viejos acostumbrados a la rapiña y satrapía, conocedores del “teje y maneje” de la corrupción y compra de conciencias, de engañar al pueblo sosteniendo con cinismo que los estudiantes de “La Cantuta” se habían autoeliminados.

Nos incomoda la realidad polarizada que vive el Perú, en que muchos no tienen noción de peruanidad, en que muchos viven como carneros, esperando que el primer carnero salte para seguir todos por mismo camino aunque fuese un precipicio el final, o mueran todos.

Esperamos que la luz encienda a las mentes de los ciudadanos del norte. Pareciera que desconocen la historia del Perú. Es cierto que cada quien decide por quién votar, pero era decisión debe estar amalgamada con la verdadera conciencia peruana, que brota del corazón, cuya lección nos dejó Túpac Amaru y Micaela Bastidas.
 

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