El “rey” Tallo Masías, controla su “propiedad” satelitalmente a los curiosos y puede bloquear e interferir a cualquier equipo electrónico en su territorio.

Hace varios años nos mezclándonos con el propietario del lugar, precisamente con uno de los dueños que están después del control “militarizado”, de tal manera, así logramos recorrer una parte de los restos arqueológicos de Portachuelo, incluso llegando a la cumbre, y para nuestra sorpresa no funcionó la filmadora ni la cámara. El ex alcalde de Alto Larán  Justo Leiva Tello nos dijo que posiblemente había sido bloqueado o neutralizado satelitalmente porque ambos objetos no funcionaron. Después hicimos varios viajes. Las fotografías que tomamos no salieron. Nuestras cámaras se trababan.

Durante el gobierno de Fujimori, primeros años de la década de 1900, fuimos con una expedición, de 30 integrantes, a estudiar las ruinas arqueológicas de Portachuelo. En la parte alta, explanada de Portachuelo, donde ahora no entra ninguna mosca, nos intervino un empleado de Tallo Masías, prohibiendo que avancemos so pena de ser denunciados como terroristas y ser detenidos por la PNP de Alto Larán, esto con prepotencia y altanería, con celular en mano y radio al costado. Minutos más tarde los policías se hicieron presentes. Tenemos las pruebas.   

En reciente viaje  hemos comprobado que efectivamente hay un control satelital, pues las fotos que tomamos tampoco salieron. Estuvimos acompañado por 4 testigos. Dos de ellos conocedores del lugar, que nos habló de la existencia de equipos que bloquean a las cámaras y otros medios digitales. Además nos refirió del imperio Masías, de cómo allí llegaban helicópteros, en horas de la noche, y también nos recordó de la reciente captura de mercadería provenientes de Bolivia, que demuestra que camiones de alto tonelaje, bolivianos, llegan a La Calera.

En la entrega de los restos arqueológicos a Tallo Masías, para su destrucción, estarían implicados el Ministerio de Agricultura y el Ministerio de Cultura, y las autoridades Chincha.

Hace mucho tiempo la prensa denunció que en La Calera se reunían Montesinos, Fujimori y otros mafiosos. Se tuvo conocimiento que allí acampó Vladimiro Montesinos cuando era buscando, después de su desembarco en Paracas. También nuestro informante nos manifestó que en Larán se habla de que Keiko Fujimori, es socio del imperio Masías. Aún hay hechos más graves como son los siniestros abusos que Tallo Masías comete contra los trabajadores.

Se presume que el equipo de interceptación y bloqueo que se usa en La Calera sea parte del SIN de Montesinos. En Chincha, conjeturamos ninguna empresa tiene  equipos muy sofisticados que se ocupen a tareas prohibidas, como intervenir a los ciudadanos de Chincha, perturbando su tranquilidad personal, y atentando contra la Constitución y Derechos Humanos.

Pues en Chincha se está cometiendo un abierto atentado contra los Derechos Humanos. Pues el control de Tallo Masías está fuera de su territorio, en una zona libre que pertenece al pueblo. Nadie tiene derecho de conculcar ni restringir la vida de las personas. Parece ser el único caso en el mundo, lo que sucede en Chincha, donde el empresario Tallo Masías ateniéndose a su poder, se burla del pueblo, y pueda actuar como si fuese un rey, dentro del Estado peruano.

No sabemos cómo las autoridades de Chincha puedan permitir que Tallo Masías ponga control en terrenos que no les pertenece. Increíble, pero verdad.