La diferencia entre robo y hurto es que en el primero se presenta con violencia hacia la víctima; en el segundo no. Perú es el 2do. país con mayor cantidad de víctimas de robos, solo detrás de Ecuador.
Por: Luis E. Forero Medina - Abogado/Especialista en
Saluderecho
El robo de objetos de pequeños o mediano valor es imparable en Lima y otras ciudades peruanas, en las que las investigaciones de las autoridades judiciales se ven truncadas por la falta de denuncia de la ciudadanía.
La diferencia entre robo y hurto es que en el primero se presenta con violencia hacia la víctima; en el segundo no. El robo de esa manera se convierte en agravado, una modalidad del hurto.
Un ejemplo de robo agravado es el arrebato por lo general de joyas u objetos personales causando lesiones pequeñas a la víctima. El “cogoteo”, cuando cogen el cuello de la víctima por detrás y le quitan sus pertenencias; o el asalto a mano armada, que generalmente es cometido por “raqueteros”.
Un ejemplo de hurto es el método llamado “lanza” , es decir hurtar las pertenencias de transeúntes o peatones en paraderos o en la via pública sin que estos se den cuenta. (En Colombia llaman cosquilleo).
El Ministerio del Interior ha establecido en el pasado que “Estamos conscientes de que el principal problema de inseguridad está en las calles”.
Otra modalidad de hurto es el express, consistente en apropiarse en tiendas o supermercados de bienes de poco valor.
Cerca de la mitad de robos en Lima ocurren en cinco distritos: Cercado de Lima – 22.1%; San Juan de Lurigancho – 8.3%; Callao - 8.1%; Ate Vitarte – 6.2% y San Martín de Porres – 5% de los robos en Lima. Muchos de los hurtos son cometidos por menores de edad. En el Cercado el asunto se agrava por la población flotante de un millón de personas diarias.
En general Perú, es el segundo país de América Latina con mayor cantidad de víctimas de robos, según Informe de Desarrollo Humano regional (IDH) 2013-2014 del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Rebeca Arias, coordinadora residente de PNUD en Perú, dijo que "tiene la firme esperanza de que los Gobiernos de la región emprendan acciones efectivas en escala nacional y local para una seguridad ciudadana con rostro humano".