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Por: Luis E. Forero Medina - Abogado/Especialista en
Saluderecho
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Han transcurrido cerca de nueve meses desde que la doctora Patricia García comenzó a dirigir las riendas de la salud pública peruana, y en este período el balance se observa desenfocado.
Dejando de un lado el comenzar a organizar y reestructurar el sistema de salud casi que partiendo de cero, la jerarca es criticada en los pasillos del Congreso de la República y en la calle por dedicarse al comienzo a hacer un tour por hospitales, y ahora a actividades propias de entidades de beneficencia, como supervisar personalmente la entrega de medicamentos , llamada a lista de los brigadistas y distribuir ayudas materiales a las víctimas del inclemente clima que azota al país; labor del Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER).
Las críticas provenientes de las bancadas del Congreso de la República, que son desestimadas por el Ejecutivo, tienen que ver que pese a la innegable preparación académica de la doctora Patricia García, no tiene el talante para la cartera que ocupa. La oposición sostiene que un requisito, el cual no llena la ministra, es haber trabajado en una posta o un centro de salud, y si es bien alejado, mejor; pero ante todo empezar a reforzar y renovar la casa.
La Comisión de Salud y Población integrada por 15 parlamentarios, una de las 24 Comisiones que tiene el Congreso, ha tenido como huésped en varias sesiones a la ministra de salud que ha expuesto y escuchado lo que se debería reformar en salud pública.
Los primeros 100 días de gestión de la ministra le quedaron cortos para “desembalsar y destrabar el sector Salud”, como lo prometió ante la citada Comisión; porque es “imposible que en poco más de tres meses se cambien la tripleta de ejes”, esto es el reforzamiento de un Sistema Integrado de Salud, el Aseguramiento de Salud y mejores coberturas de vacunación, y recursos humanos. En cuanto al primer eje las colas siguen y los tiempos de espera no disminuyen.
De otro lado, se ha puesto de presente que en muchas regiones aisladas de Lima, la atención primaria en salud dejaría mucho que desear; aunada a la carencia de cobertura y falta de calidad que debe soportar la mayor parte de la población, en comparación con otros sistemas de salud con mejores ventajas, como es el caso del mismo “MINSA, EsSalud, Fuerzas Armadas y las empresas privadas. Como se dice coloquialmente, o todos en la cama, o todos en el suelo.
La transferencia al Minsa del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN), so pretexto de “descentralizar la atención", sería una movida equivocada e improvisada por la magnitud del INEN; es como haber multiplicado varias veces la nómina y asuntos del Minsa. En cuanto a la atención en salud a la población indígena, la Defensoría del pueblo ha denunciado un “posible retroceso”.
Cuando se pide la cabeza de la ministra de salud, la respuesta del gobierno es que "es una falta de respeto"; sin embargo la Comisión de Salud en manos de mayoría de parlamentarios de Fuerza Popular, liderada por Keiko Fujimori, siguen paso a paso a la doctora García para que sus palabras no se queden en el aire. Cabe recordar que a finales de 2014, la ministra de Salud, Midori De Habich, dimitió por la moción de censura del Congreso.
En el Perú en los últimos años se ha debatido acerca de “insertar cambios en la política sectorial de salud” pero eso ya se ha convertido en algo asi como un mantra "canson" que no tiene fin.
@luforero4