ICA -
Autoridades de la Reserva Nacional San Fernando, ubicada en la provincia de Nasca, región Ica, recibieron una donación de equipos y muebles para mejorar el control y las acciones de monitoreo de la biodiversidad, paisajes y recursos naturales de esa área natural protegida.
Pedro Gamboa, jefe nacional del Servicio Nacional de Áreas Protegidas por el Estado (Sernanp), entidad que administra la Reserva San Fernando, destacó la donación entregada por la empresa Contugas, que ayudará a la conservación de las áreas naturales protegidas.
“La conservación no es posible si se trabaja sin apoyo. Siempre han sido poblaciones locales, gobiernos regionales, gobiernos nacionales y últimamente actores privados los que se suman a este esfuerzo. Por eso, para nosotros, es muy importante porque demuestra que se puede generar una alianza entre la conservación y el sector privado”, aseveró.
Sernanp y Contugas firmaron un convenio interinstitucional que permitirá un mejor monitoreo y cuidado de la Reserva Nacional San Fernando. Como parte de este acuerdo la empresa entregó en calidad de donación: dos cuatrimotos, un dron hexacóptero profesional, dos tanques de agua de 2,500 litros, paneles solares y una tranquera de vigilancia.
Esta nueva infraestructura ubicada en el sector ramal Nasca, será un ambiente desde el cual el personal guardaparque “podrá gestionar y realizar distintas acciones de control y vigilancia, así como el monitoreo de las distintas especies de flora y fauna silvestre que se conservan en esta área protegida”.
La Reserva Nacional San Fernando
San Fernando es un área marino-costera que cuenta con 7 ecosistemas. Como atractivos principales se aprecian lobos marinos y pingüinos; en el desierto se pueden encontrar guanacos, que desde la sierra llegan al lugar para alimentarse del Tillandsial, especie vegetal típica de zonas áridas y que es la principal fuente de alimento de estos animales que migran hasta la Reserva.
Por su parte, Mauricio Restrepo Ospina, subgerente de Relaciones Institucionales de Contugas, sostuvo que se continúa con el relacionamiento genuino con el Estado a través de la firma de convenio con Sernanp.
La relevancia de este compromiso se refleja en los esfuerzos realizados para contribuir a la conservación y desarrollo sostenible de la Reserva a través del control y el monitoreo biológico, como sucede en el trasplante y vigilancia de la especie de Tillandsial, proceso desarrollado por Contugas, fortaleciendo así la gestión del área natural protegida.
Tierra de mares y andes
El área natural protegida está ubicada entre el distrito de Santiago en la provincia de Ica y en los distritos de Changillo, Nasca y San Juan de Marcona, en la provincia de Nasca, región Ica, teniendo una extensión de 154,716.37 hectáreas.
El requisito indispensable para conocer la Reserva Nacional San Fernando es viajar a bordo de una camioneta 4x4 para atravesar las dunas y el terreno accidentado. En el kilómetro 477 de la carretera Panamericana Sur se toma un desvío hasta llegar a este maravilloso lugar.
Al llegar a la Reserva, desde el mirador de Punta Gallinazo, se observan lobos chuscos que se encuentra en la orilla descansando, como también algunos pingüinos caminando entre las rocas.
Aunque sea extraño, muchos visitantes también llegan a apreciar zorros andinos e incluso, al caer la tarde, el vuelo de algún cóndor, ave que llega a la Reserva para alimentarse de los lobos marinos que mueren en la zona.
La Reserva es gestionada por el Sernanp, organismo técnico especializado adscrito al Ministerio del Ambiente (Minam), cuya labor es salvaguardar la conservación de la biodiversidad, coordinar con los principales actores locales y regionales para llevar a cabo una gestión participativa, y contribuir al desarrollo económico y social del país.
La Reserva Nacional San Fernando es la única área natural protegida marino-costera con un corredor biológico natural andino-costero (cóndor y guanaco), que llega hasta el ámbito marino y se convierte en un corredor marino de especies como pingüinos, tortugas, ballenas y lobos.
¿Sabías que?
En la Reserva Nacional San Fernando se encuentra el cerro Huaricangana, el más alto de la costa peruana (1,790 msnm), alzado por la placa de Nasca al chocar con la Continental.
San Fernando es hogar de plantas acuáticas como las macroalgas que alimentan a especies importantes para la pesca nacional como la anchoveta, la sardina y el pejerrey, así como de flora terrestre como relictos de huarango y toñúz, representativas de Ica.
Asimismo, es hábitat natural de decenas de especies de fauna silvestre entre las que destacan el zorro andino, zorro costero, el guanaco, la nutria marina, el lobo de mar chusco y fino, el murciélago orejón, el cóndor, el guanay, el piquero y el pelícano. El pingüino y el potoyunco son especies amenazadas que encuentran en San Fernando un buen lugar para vivir y reproducirse.
Fuente: Andina