Por: Luis E. Forero Medina Abogado/Especialista enSaluderecho

Se afirma que la dificultad en conseguir una cita inmediata en salud es lo contrario de Uber. El tiempo de espera de una consulta médica general, es diferente al tiempo de duración de la misma; en el primer caso se extienden por semanas y meses; para el operador de trasnporte no hay agenda.

En promedio las consultas de atención primaria duran menos de cinco minutos para la mitad de la población mundial; si la consulta médica es en Bangladesh demora 48 segundos, de acuerdo a un análisis internacional realizado en 67 países, publicado en BMJ Open. En Suecia la cita con el doctor dura hasta 22,5 minutos, según  esa revista en línea de acceso abierto, dedicada a la publicación de investigaciones médicas.

No hay una norma legal  que regule la duración mínima de las consultas en la atención primaria y con especialistas, dejando ese tema al arbitrio de  los médicos o entidades prestadoras de salud. En consultas de pediatría, algunas veces asignan máximo 20 minutos por paciente porque “el examen físico de los menores de edad es más demorado que el de los adultos”.

En  la duración de la consulta influyen el médico y  el paciente; en el galeno algunas veces se suele hallar su amplia disponibilidad de tiempo; en el enfermo, tienen que ver su  edad, sexo y personas ajenas a la consulta. Excepto de los médicos que atienden en sus consultorios  particulares a personas con capacidad de pago, la generalidad de ellos  son dependientes civil o laboralmente,  evento en el cual quienes los contratan les asignan un número mínimo de pacientes a atender en su turno.

La consulta médica en sí se reduce a la más mínima proporción por las situaciones derivadas de la misma; el médico por formar parte de la cadena de facturación debe diligenciar un formato; además el tiempo que utiliza  en la historia clínica, autorizaciones, remisiones;   posibles interrupciones de sus colegas, visitadores médicos,  el celular, etcétera.

La opinión general del binomio médico-paciente es que  se dedique más tiempo de escucha  del primero al segundo.

El futuro de la consulta médica que ya comenzó, serán las apps; en Europa más de la cuarta parte de la población lleva  literalmente  al médico en su bolsillo. “En unos años, cada fármaco vendrá con una aplicación y habrá un app para cada enfermedad”, dijo el médico, emprendedor e inventor Daniel Kraft  de la Universidad Singularity.

@luforero4