Como ya es de conocimiento general, un incendio afectó la madrugada de este sábado a la estatua del Cristo del Pacífico en Chorrillos, el distrito del sur de Lima, según reportaron los bomberos de la capital peruana. Aunque la prensa local informó en un principio que en la base de la efigie había trapos con olor a combustible, la Policía Nacional descartó durante la mañana que se tratara de un acto de vandalismo y aseguró que un cortocircuito originó el fuego, según información de la agencia oficial Andina.
La estatua de 22 metros de altura, hecha de resina de poliéster (fibra de vidrio) con un acabado de apariencia de cemento, fue donada en abril de 2011 por la constructora brasileña Odebrecht al Gobierno del entonces presidente Alan García. Los daños se producen a pocos días del inicio de la visita del papa Francisco, quien llegará a Lima el jueves 18 de enero.
En 2011, el donativo de la empresa brasileña fue polémico porque la imagen fue colocada en una zona histórica intangible, en la bahía de Chorrillos, con celeridad y sin previa consulta con el Ministerio de Cultura ni con la Municipalidad de Lima. En su carta de intención de donación, la firma brasileña dijo que entregaba la escultura, una réplica del Cristo de Corcovado de Río de Janeiro, para “contribuir al mejoramiento urbanístico de la ciudad de Lima y el embellecimiento de la zona”.
Cada noche, la imagen luce iluminada con dos colores: fucsia o verde. Fue ubicada a corta distancia de la Cruz del Papa, una escultura de 45 metros inaugurada cuando el papa Juan Pablo II visitó Perú en 1988. Debido al fuego, la parte anterior del Cristo ha quedado ennegrecida.