Por: Eucadio Gutiérrez Solano   Profesor/Periodista

Cuando el pueblo peruano atraviesa por una atroz crisis económica que afecta a los pobladores de bajos recursos económicos, como “el asalto a mano armada” a los ciudadanos con el reciente incremente del precio de la gasolina, en el distrito de Chavín, provincia de Chincha, sucede el más espantoso y horrible “crimen presupuestal”, en donde se destruye el edificio de un colegio integrado, en funcionamiento, construido hace poco tiempo, después del terremoto del 2007, con el tesoro público, por el ex alcalde revocado Oscar Vilcamiza Manrique, que hoy se lanza como candidato a Consejo Regional de Ica.

El hecho es por demás insólito cuando el pueblo de Chavín no tiene los más elementales servicios de salud, nutrición, calidad educativa, y obras de infraestructura.  Un derroche inconcebible de dinero como si Chavín o el pueblo chinchano no requiriesen de obras, y los millones están para gastar de cualquier forma.  Chavín no tiene un hospedaje para atender a los visitantes, ni ambientes para una biblioteca, museo, taller de artesanía, espacios destinados para los ancianos abandonados, y local para estudiantes de los anexos y de localidades alejadas que vienen a estudiar al distrito. Pero, si hay plata por millones para despilfarrar, derribando un colegio modernamente construido.

Es decir, el pueblo de Chavín carece de obras que estén de acuerdo con la fisonomía de un pueblo que va ritmo a la modernidad. Además, no tienen ningún ambiente adecuado para atender a los visitantes, como restaurantes, zonas de recreo o descanso y atención a los visitantes y lo peor no tiene agua potable.  La decena de veces que hemos visitado últimamente, nunca hemos encontrado agua potable circulando por los servicios higiénicos, sino un cilindro con agua contaminada.

Los ambientes del colegio que se viene destruyendo pudo usarse para muchos fines. Ambientes para el Municipio y para los pobladores que venían de visita hacían mucha falta. Las aulas tenían cientos de usos urgentes, en vez de su destrucción. Pero a las autoridades no les interesó nada, sino tumbar el edificio del colegio integrado. Hay que indicar, que las autoridades no tienen planificación, pues las aulas que hoy se destruyen, fueron construidas en un terreno en donde se realizaba Ferias Semanales, entonces se tomó por asalto un terreno destinado para la feria, y no para una la escuela.

En Chavín terrenos sobran. Lamentablemente las autoridades optan por el facilismo, y hacen lo que se les ocurre.  Los 5 millones pudo haberse usado para traer agua de otros lugares, agua que es de primera necesidad en Chavín, o para el Centro de Saalud.

Según se ha comentado en otros medios, en este macabro despilfarro de dinero estaría el ex alcalde Alfredo Peña Castillón, que por tercera vez quiere ser alcalde de Chavín. Se trataría -dicen-  de un contubernio del Presidente Regional y Alfredo Peña, teniendo como acólito a Néstor Mendoza, antes personaje de confianza del ex alcalde Peña, como repetidas veces se sostuvo por Radio Nova de Chincha. 

La Fiscalía de la prevención del delito debería intervenir de inmediato, y denunciar a la subprefecta Mirtha Lévano Guillen, por su complicidad, también brazo derecho del exalcalde Alfredo Peña. Nos preguntamos, ¿qué está pasando en Chavín? Lo que se está haciendo con la destrucción del edificio del colegio integrado de Chavín no tienen nombre. Urge la inmediata investigación.

NB: Los artículos publicados en esta Sección Opinión Libre son de entera responsabilidad de sus autores. El contenido no refleja necesariamente la opinión de Huachos.com