Por: Luis E. Forero Medina  /Abogado/Especialista enSaluderecho

En 2015 en este blog se afirmó que probablemente “se destinaría un Decenio Internacional” a la agricultura familiar “para brindarle esa necesitada atención”.

Al año siguiente se estableció el Programa de trabajo para el Decenio de las Naciones Unidas de Acción sobre la Nutrición, 2016-2025 y a finales de  2017 fue declarado por las Naciones Unidas el Decenio Internacional a la agricultura familiar; lanzado a mediados de julio de este año en Nueva York, y  en América Latina y el Caribe a finales del pasado mes de  agosto, ocasión en el que Julio Berdegué, representante regional de la FAO para América Latina y El Caribe dijo que “el sistema alimentario ha fracasado en alimentar saludablemente a la población.



El 47% sufre alguna forma de malnutrición. La agricultura familiar tiene el desafío de combatir la epidemia descontrolada de sobrepeso y obesidad”.

En el mundo, las granjas familiares representan más del 90 por ciento de todas las granjas y producen el 80 por ciento de los alimentos del planeta; en América Latina y el Caribe ocho de cada diez explotaciones de la región son parte del sector, alrededor de 16,5 millones de explotaciones agrícolas de esa naturaleza. En Chile predominan las granjas familiares.

Sin embargo, no existe un clisé de agricultor familiar o granjero familiar; concepto que varía de una nación desarrollada a otra que no ha alcanzado ese nivel. En Perú la mayoría de agricultores familiares viven en zonas de pobreza, vulnerables y expuestas a los efectos climáticos, económicos y sociales.

La  agricultura familiar, una  de las tres prioridades de trabajo de la ONUAA, (La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura,) en la Región,  comprende  la producción de  alimentos de origen vegetal, de origen animal y alimentos producidos en tierras agrícolas, bosques, montañas o en piscifactorías.
 

A la agricultura familiar le atribuyen diversos beneficios:  Es un aliado fundamental para impulsar el desarrollo sostenible, eliminar el hambre, la obesidad y todas las formas de malnutrición; de ahí que tenga íntima relación con el Decenio de las Naciones Unidas de Acción sobre la Nutrición, 2016-2025. Actualmente unos 800 millones de personas padecen subalimentación crónica y más de 2 000 millones de personas sufren deficiencias de micronutrientes.

Los agricultores familiares proporcionan alimentos sanos, diversificados y culturalmente apropiados, pueden ayudar a reducir o evitar los riesgos del cambio climático; garantizan el traspaso de conocimientos y tradiciones de una generación a otra, puntualiza la FAO, o lo que lo mismo la ONUAA.

La FAO busca mejorar el acceso del sector a recursos, fortalecer las organizaciones de productores y promover la participación de las comunidades rurales en las estrategias de desarrollo rural sostenible.

Acerca de la agricultura familiar, en Perú esta semana informan que se han “propuesto trabajar en el planteamiento de políticas que tengan como base la agricultura familiar, siendo ésta una de las prioridades del ministerio de Agricultura y Riego (Minagri), y que “Vamos a publicar (este año) el Plan Nacional de Agricultura Familiar Plan Nacional de la Agricultura Familiar”.  Entre tanto hace cerca de dos años en la Comisión Agraria del Congreso de este país, duerme el sueño de los justos   la aprobación del dictamen del proyecto de ley, que amplía por 10 años la vigencia de la Ley de Promoción Agraria (27360). Al momento el Perú tiene vencida dicha ley de Promoción Agraria.

Los agricultores familiares necesitan políticas públicas habilitarles y marcos legales que les "permitan adaptarse y prosperar en el entorno cambiante de hoy" y maximizar su contribución al desarrollo sostenible, dijo el Director General de la FAO, José Graziano da Silva.
 

@luforero4