Se sabe que el cartel de Guzmán se nutre de la droga que se procesa en la zona amazónica de los Valles del Río Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), considerado el emporio mundial de la coca en el Perú.
Vargas precisó que con la captura del jefe del Cartel de Sinaloa las operaciones de esta organización mexicana en Perú no sufrirá ninguna alteración debido a la capacidad operativa de esta organización. “Cuando uno de sus integrantes cae es rápidamente reemplazado”, subrayó.
Es a partir del 2000 que el Cartel de Sinaloa cobra importancia en el territorio peruano y empieza a operar en alianza con los carteles del narcotráfico colombianos, quienes ya tenían establecidos sus nexos en este país.
“Desde el año 2000 se han hecho presentes y están aquí con nosotros operadores intermedios de estas organizaciones criminales mexicanas, especialmente del Cartel de Sinaloa, de Juárez, de Tijuana y se habló, inclusive, de los carteles nuevos”, sostuvo.
Con respecto a la política antidroga de las autoridades peruanas, el analista precisó que no se ha golpeado a los “peces gordos” de estas organizaciones criminales, pese a que algunos de estos han visitado este país.
Vargas precisó que la mayoría de operativos antinarcóticos de las autoridades peruanas se llevan a cabo en las zona cocaleras como el Vraem y otras regiones de la Amazonía donde miles de campesinos cultivan hoja de coca desde tiempos inmemoriales, como parte de su cultura.
Para Vargas, la corrupción en Perú hace que las incautaciones sean bastante bajas, “nunca hemos superado el 7,0% de la producción de cocaína que es poco más de 400 toneladas anuales”.
VIDEO DE ARCHIVO DEL 2010
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