Por: Luis E. Forero Medina  Abogado/Especialista enSaluderecho

Si el discurso del presidente Vizcarra fue largo y aburrido, se supo que el del jefe del Gabinete Ministerial, Pedro Cateriano  será difuso y monótono, cuando se presente

Pronosticamos que su disertación viene llena de cifras, citas y términos económicos ininteligibles a unos parlamentarios, la mayoría neófitos en la materia. Es como si a unos monjes mendigos se les expusiera sobre el valor monetario del bitcoin en el mercado de capitales.

Ese día y a esa hora se prevé un plantón frente al Congreso para rechazar el voto de confianza a Cateriano.

Cateriano  se muestra seguro en el apoyo de las bancadas parlamentarias y  centrará  su discurso de más de una hora en describir dos temas: La política general de Gobierno y las medidas para ejecutarlas, entre las cuales estaría aumentar el impuesto a la minería para compartir la riqueza que genera ese sector, y no se sigan supuestamente embolsillando toda la ganancia ciertas empresas extranjeras.

Aunque las bancadas parlamentarias no han definido si votarán a favor o en contra de Cateriano y su Gabinete, los dardos venenosos no se descartan; en principio Cateriano sería cuestionado por el reciente violento conflicto en Espinar y el cambio repentino de opinión sobre el tributo minero.

Como preparando el terreno Cateriano ha dicho hasta el cansancio que “el peor escenario para el país es una confrontación”. Quienes conocerían su trayectoria, afirman que esa frase proviene “de quien formó parte de un gobierno no solo corrupto, también envilecedor como el de Humala”.

El discurso de Cateriano también hará alusión a la fórmula salvadora que traen en la manga para el poco menos de un año que le resta al actual gobierno. Con el denominado   Pacto Perú, la economía repuntará; el diálogo brillarà; se  logrará la estabilidad política, pero ante todo es otro esfuerzo   “para intentar superar los problemas existentes”, dijo el abogado de 62 años.

La reciente crisis de gobernabilidad en el Perú tiene como antecedentes inmediatos, el encarcelamiento de tres expresidentes de la República, el asesinato de uno de ellos para evitar la captura,  la renuncia de  PPK, la pelea entre una Jefe de Gabinete y un vicepresidente ausente de la Nación en un atractivo puesto diplomático, las bancadas parlamentarias desprestigiadas, las permanentes choque de trenes  entre poderes del Estado, la disolución del Congreso de la República por el actual presidente; la elección de un Congreso para cumplir el período del disuelto; en fin, el “favor” hecho por Vizcarra de convocar elecciones para presidente y nuevo   Parlamento. No es una muestra de su democracia, señor presidente, era su deber, a menos que imitara a su ultra enemigo en este sub continente.

@luforero4