LIMA - Entre enero del 2016 y agosto del 2017, personas inescrupulosas cobraron 6 millones 825 mil soles de los fondos del programa social Pensión 65, usando la identidad de 22 mil 459 fallecidos.

El robo afecta directamente a los beneficiarios de Pensión 65, cuyo objetivo es otorgar subvenciones económicas a adultos mayores que viven en condiciones de extrema pobreza. Es decir, los más pobres entre los pobres.

Pensión 65 es uno de los programas focalizados más importantes del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS). En 2016, gastó 797 millones 652 mil 39 soles en el mencionado programa, en 2017 se incrementó a 881 millones 673 mil 471 soles y está previsto para el 2018 más de 863 millones de soles, de acuerdo con el Informe de Cumplimiento del Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65, elaborado por peritos de la Contraloría General de la República.

Costosa reincidencia

La modalidad consiste en que personas aprovechando que el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) no consigna de inmediato el fallecimiento de un ciudadano, cobran las pensiones de estas porque continúan apareciendo en el padrón de los servidores de Pensión 65. Lo que corresponde es la inmediata desafiliación al reportarse la muerte del pensionista. Funcionarios del Programa Pensión 65 detectaron que la mayoría de cobros indebidos se hicieron en las siguientes regiones:

Puno: 3.396 casos.

Cajamarca: 2.108 casos.

Cusco: 1.796 casos.

Ayacucho: 1.589 casos.

Piura: 1.510 casos.

Áncash: 1.408 casos.

Huánuco: 1.338 casos.

No es la primera vez que los fondos de Pensión 65 sufren este tipo de malas prácticas. Entre enero del 2011 y diciembre del 2014, Pensión 65 depositó 9 millones 566 mil soles a 22 mil 974 personas fallecidas.

Contraloría

Fuentes de la Contraloría indicaron que no reportan las muertes porque viven en lugares rurales muy alejados, la mayoría de ellos, en caseríos.

Recomendaron intensificar las visitas de campo a los afiliados del Programa Pensión 65 e informar de inmediato a su Unidad de Operaciones y esta, a su vez, a Reniec, para así evitar que exista un desfase en la base de datos del Reniec en cuanto a estados de supervivencia.

De los 119 mil afiliados del programa, los estafadores usaron las identidades de 22 mil 459 fallecidos para recibir el dinero que no les correspondía, lo que representa un 20% del total del programa.