El príncipe, hijo del rey Mohamed VI de Marruecos, es el último descendiente de la dinastía Alauí, que ostenta el trono desde 1631.
 

El heredero al trono de Marruecos, Moulay Hassan, de 12 años de edad, rechazó en uno de sus primeros actos oficiales el tradicional saludo de besamanos, una costumbre en las que los dignatarios del reino presentan sus respetos al rey, o en su ausencia, al príncipe heredero. En el video, que ya cuenta con más de 312 mil visitas en Youtube, se observa cómo trata de esquivar los besos en la fila de dignatarios.

El saludo de besamanos es especialmente utilizado en actos oficiales de las monarquías occidentales y reinos de influencia como requisito protocolar, y en los países con influencia del Islam, como Marruecos “la tierra de Dios”, el gesto tiene un sentido mucho más significativo ya que sus gobernantes tiene un estrecho vínculo con la esfera espiritual.

Las opiniones por el hecho se han dividido, mientras que la prensa más tradicional opina que se trató de un desplante imperdonable del heredero a los funcionarios de Casablanca, capital del país africano; otros portales ven el él un acto que renueva las costumbres de la monarquía marroquí y equilibra las relaciones entre los súbditos y el príncipe.