SURCUBAMBA | Familiares de efectivos policiales de la Comisaría de Surcubamba (Tayacaja) denunciaron un presunto abandono a los efectivos quienes estarían contagiados con COVID–19.
Los familiares afirman que luego de ir a una diligencia en San Marcos de Rocchac, tres efectivos quedaron contagiados, los mismos que ahora, junto a todo el personal, estarían haciendo una cuarentena dentro de las instalaciones policiales.
Sin embargo, el problema es mayor, ya que afirman que la población les ha dado la espalda ya que ni siquiera quieren darles de comer.
“Los compoblanos de Surcubamba no quieren ni venderles comida ni siquiera prepararles, hasta quieren quemar la comisaría, eso nadie lo sabe y al parecer no dan cuenta, ¡Qué van a comer!”, afirmaron los familiares en comunicación con Correo, quienes prefieren mantener el anonimato a fin de preservar la integridad de los suboficiales y evitar represalias.
En entrevista con este diario, el jefe del centro de salud de Surcubamba, Hugo Benito, afirmó que hay suboficiales asintomáticos y uno presenta leves síntomas como tos y dolor de garganta.
Sin embargo, les preocupa la situación de una mujer policía, quien presenta muchos síntomas, pero, en las pruebas rápidas salió negativo.
Benito afirmó que para ella le están pidiendo tomar la prueba molecular, a fin de descartar.
“Hemos priorizado el cerco epidemiológico, con ello hemos captado a más sospechosos para prevenir, aislar y evitar contagios”, dijo Benito.
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