Sucedió lo que se venía anunciando. Ganó la corrupción y la mafia. La primera dama del gobierno más corrupto obtuvo la más alta votación, con cerca de 40 por ciento de electores ciegos o amantes de la delincuencia y de la vida fácil.  El JNE, la ONPE, la prensa corrupta, y la derecha se coludieron para destruir el Perú, y sentaditos recibir millones de soles con el retorno de Vladimiro Montesinos, que por analogía, anunciara su salida la congresista Cecilia Chacón, refiriéndose al delincuente más grande Perú, Alberto Fujimori. Increíble, pero verdad.

Contribuyó en la traición al Perú por los departamentos o regiones del norte el gobierno de Ollanta Humala y la prensa estatal Radio Televisión del Perú y Gregorio Santos, que por amor a un cargo público mantuvo la división de un sector de peruanos, conduciendo a Cajamarca como a un pueblo ambivalente y sin horizonte.

Jugó un papel determinante la incapacidad del Presidente Ollanta Humala para solucionar el problema de la seguridad ciudadana, y no haber actuado a tiempo para poner fin la maléfica acción de la derecha, que venía cocinando desde años el holocausto del Perú. Y, la mayor indignación que causa al pueblo consecuente es el accionar cual un mendigo , en todo caso, de los fujimoristas anidados en la Radio Televisión del Perú, órgano oficial nacional, que discriminando vía dinero, posiblemente previo pacto, hizo la millonaria campaña a favor Keiko, ex primera dama de la corrupción.  Una desilusión para la gente honesta y pensante.

Meses atrás se venía cocinando que así suceda. Sacaron de la lid electoral a Guzmán y Acuña, que se perfilaban como ganadores dejando libre a Keiko y PPK, no obstante de tener graves denuncias, y salvando a Alan García Pérez, un día antes de las elecciones. Lo que iba suceder estaba cantado con anterioridad, pues se venía denunciando de la concertación del JNE, El APRA Y KEIKO.

La lectura del resultado de las elecciones es un juego descarado de la derecha, creída por los ingenuos. El resultado ya se sabía. Se trata de un trabajo mafioso-científico que ellos realizan para engañar al pueblo. Todo está craneado inteligentemente, para no despertar sospechas ni protestas, aunque los ciudadanos pensantes ya han rechazado la farsa y el fraude electoral.

La mafia desesperados por la desaparición del APRA, que ha anunciado votar por KEIKO, en la segunda vuelta, utilizó su armas, y envenenó a los protestantes, salvando que 6 congresistas apristas lleguen al poder. Las leyes se interpretan a su regalada gana. Así ha sido siempre.

De otro lado para haya tantos votantes con signos de tara, es la educación peruana que se encuentra en el tacho, cuyo asesino del ser pensante es el “judío” del Vexler y el gobierno de Ollanta, que cree ingenuamente que está haciendo la revolución educativa.

La prensa cloacal y los maestros del Perú, sobre todo los del norte del país, han “estupidizado” a las personas como decía Hildebranth, y reanimalizado a la población tal acota Denegri. La realidad es así, estamos en la etapa de la cretinización de la educación, para sobre poblar al Perú de tarados, estúpidos, delincuentes y trabajadores de las potencias económicas.

Nos preguntamos, ¿en que trabajan los peruanos que emigran? Ofreciendo su mano de obra barata, precisamente han sido educados para esos propósitos. ¡Qué asco y vergüenza!