Por: Eucadio Gutiérrez Solano   Profesor/Periodista

Hace más de 5 años, con sendos documentos, decenas de veces, sugerimos a la compañía minera Milpo que con inteligencia resuelva los problemas que se avecinaban, no porque seamos brujos, sino era una realidad palpable que se venía cocinando, y que iba estallar tarde o temprano.

Por anunciar la verdad y decir sanamente lo que Milpo debía hacer para neutralizar, a tiempo, las controversias y el divisionismo mortal que venía incubándose, fuimos denunciados hasta amenazados de que le queremos matar. Para eso, haciendo gala de su poder económico nos denunció por un millón de dólares, con la finalidad de encarcelarnos y amordazarnos, y por ende a toda la población de Chavín, asustarlos y correrlos, para que se callen de los abusos que se venía cometiendo, como represalia por sumarse a la defensa de los intereses del pueblo.

En el juicio, los abogados de Milpo a toda costa, envalentonados y demostrando soberbia nos quiso arremeter tratando que comamos el sapo, humillándonos, pensando seguramente que contaban con el apoyo de la población chavinera, se diría de los dirigentes traidores. Incluso se habló que el grupo Romero estaba motivado hundir a Eucadio Gutiérrez, para cuidar sus intereses. Fue un espejismo de corta duración. La alegría y la felicidad de Milpo duraría poco tiempo.  Las cosas y los problemas en Chavín cada día venían acelerándose geométricamente. El 17 de octubre y en otras asambleas anteriores los comuneros dijeron que no se vende ni un metro de tierras a Milpo, por los abusos que venía cometiendo y no haber cumplido con el Convenio Marco y las Adendas.

El revés y la sorpresa de Milpo se produce el 4 de marzo del 2018. Aquel día histórico los comuneros en un porcentaje considerable asistieron a la asamblea. Desde un primer instante se observó la formación de 2 grupo antagónicos, pifias, insultos y burlas se notaban en ambos lados.

Sorpresivamente ese día habían asistido a la asamblea todos los líderes o cuadros que gozaban los cariños de Milpo o recibían beneficios de la mencionada empresa. 

Entonces comenzaron el desarrollo de la escena, que según las observaciones habrían sido planificadas anteladamente o coordinados bajo la mesa, para atentar contra los intereses de Chavín. Los oradores hicieron su cola y comenzaron a ensayar su mejor verborrea desgraciadamente a favor de Milpo, pidiendo abrir las puertas a dicha empresa, porque de lo contrario el desarrollo del pueblo se estancaría. Los pobladores defensores de sus intereses consideraron el desliz de los malos dirigentes como una burla y fue rechazada con fuertes palabras cargadas de repudio. La multitud demostró su descontento y extrañeza ante los expositores que defendían a Milpo con garras y dientes. Y que pedían ardorosamente la vigencia inalterable de la IV Adenda que favorecía a Milpo. Para esto, para que observaran sus tributos, alegorías, fidelidad y sacrificio, los malos dirigentes llevaron a la asamblea a los funcionarios de Milpo, quienes observaban el desarrollo caldeado de la asamblea. El pueblo se exaltaba más cuando Felicia Castro, empleada de Milpo, sostuvo haber dado más de 80 millones de soles. Se escuchó voces de protesta y preguntas, ¿tanta plata logró gastar estos zamarros?...

 

La ubicación de los comuneros en el lugar que le corresponde fue muy emotiva, de pura convicción, dignidad y honor, difícil de pronosticar el resultado.  Por momentos la carga se inclinaba a favor de Milpo, pero al final los comuneros decidieron votar por la restructuración de la IV Adenda, con una diferencia por cerca de 30 votos. Los perdedores, identificados como traidores, no sabían si abandonaban o lloraban. Porque en esta votación se destapó la olla, se produjo el cataclismo, se descubrió públicamente quienes estaban con el pueblo, y quienes a favor de la compañía minera Milpo, o quienes habían pactado bajo la mesa.

La asamblea siguió. La lluvia empezó a caer torrencialmente y los ganadores en un porcentaje considerables abandonaron el centro de la asamblea. Es entonces que los dirigentes adoloridos por la derrota ponen en la agenda la venta de tierras a Milpo, cuando esto no estaba contemplado, y acuerdan, a vuelo de pájaro, vender las tierras a Milpo, sin los votos de los que salieron por efecto de la lluvia, y proceder de una forma diferente, mano alzada, contraviniendo un acuerdo anterior donde los comuneros por amplia mayoría dijeron no la venta de tierras. El día lunes y fechas posteriores los comuneros denunciaron el engaño y el fraude producido en la asamblea comunal, al que dijeron que dicha asamblea era nula por haberse viciado, y solamente favorecer a Milpo.

De modo, la guerra comenzó con la identificación de los traidores. A quienes a diario se les menciona sus nombres. Los anexos y caseríos empiezan a movilizarse. La lucha será atroz, como se ve.

Aquel día, 4 de marzo, de recuerdo para los empleados de Milpo. Fue un día de castigo, porque tuvieron que soportar unas 4 horas de pie. Este acto debe servir para que Milpo reflexiones, y sepa actuar con inteligencia, y coordinar con el pueblo.

Definitivamente la hora de combate llegó. Si el Gobierno y Milpo no toma las acciones correctivas, el pueblo de Chavín habrá explosionado y traería graves consecuencias.

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