El departamento de Huancavelica no es solamente papa, alpacas y minas. Hay abundancia de otros productos no tradicionales pero ignorados por los organismos estatales (de privados no se puede hablar porque simplemente no existen) que no hacen practicamente nada para desarrollarlos y promoverlos como una actividad económica. 0 ayuda en Investigación y Desarrollo, 0 ayuda en la producción, 0 ayuda en Comercialización y Marketing, 0 ayuda en Distribución y ese es el caso de los huevos de codorniz.

El huevo de codorniz se caracteriza por reducir episodios de migrañas, salud ocular y de la piel, fortaleciendo el sistema nervioso, evitando el estrés y la ansiedad, señaló la nutricionista Nefi Mendoza, de Solidaridad Salud.

“El huevo de codorniz posee un alto contenido de vitaminas y minerales, los cuales son tres veces mayores al huevo de gallina y se le considera  como un alimento dietético y curativo, ya que almacena minerales como fósforo, calcio, hierro, potasio, zinc, magnesio y las vitaminas A, C, D, E, K así como el complejo B donde resalta el contenido de B2 y B5”, subrayó.

Dijo que, en esta época del año, es fácil ubicar a vendedores de huevos de codorniz en paraderos o esquinas en diversos distritos y muchos los consumimos por simple antojo o para saciar nuestra hambre del momento, pero la mayoría desconoce las potencialidades nutricionales que brinda este alimento en el organismo.

El contenido de colesterol presente de este alimento es bajo en comparación al huevo de gallina. También tiene propiedades antialérgicas, ya que presenta proteína ovomucoide reforzando el sistema inmunológico.

“El consumo de huevo es recomendable para todo grupo etáreo, ya que presenta un alto contenido de proteínas y albumina, por ser de origen animal se absorbe casi en su totalidad en el organismo (97%) y por su bajo contenido de colesterol”, anotó la nutricionaista.

Aclaró, sin embargo, que si la persona presenta hipercolesterolemia (colesterol alto en sangre), debe cuidar el consumo de la yema de huevo y debe ser consultado con su nutricionista.

Mendoza dijo que si la persona es sedentaria es necesario consumirlo tres veces a la semana y si es activa los siete días de la semana por su alto contenido nutricional; sobre todo por el gran aporte de proteínas necesarias, siempre y cuando tenga un peso adecuado. El consumo de este alimento debe ser de tres a cinco unidades al día.