BUENOS AIRES | La Fiscalía General de San Isidro, a cargo de la investigación sobre la muerte de Diego Armando Maradona, ha ordenado el registro del domicilio y la consulta de Leopoldo Luque, médico personal del astro argentino en esta última época.

El motivo principal del allanamiento es encontrar el historial clínico de Maradona y conocer si los cuidados que le procuraron tras la operación a la que se sometió para rebajarle un hematoma subdural fueron los adecuados. Luque se podría enfrentar a una acusación de homicidio culposo.

La Fiscalía quiere contrastar también si la versión de Luque sobre el estado de salud de Maradona en los últimos tiempos coincide con la aportada por las tres hijas del «diez»: Dalma, Gianinna y Jana.

A Luque le han criticado que permitiera que Maradona abandonase antes de tiempo la clínica en la que fue operado y también que dejara que el astro no tuviese una atención más específica en el exclusivo barrio de San Andrés donde pasó sus últimos días. En la casa donde residía no había ni un desfibrilador.

Maradona, ganador del Mundial de México 1986 con la selección argentina, fue ingresado de urgencia hace tres semanas en una clínica de la ciudad de La Plata con signos de anemia y deshidratación. Allí se le detectó un hematoma en el cerebro del que fue operado sin complicaciones. Tras ello, abandonó el centro hospitalario para continuar con su recuperación en su domicilio.