José Carlos Solari, el delincuente que trasladó a los sicarios que asesinaron a seis miembros de la familia San Román en el cruce de las avenidas La Marina y Riva Agüero, terminó por delatar la identidad de sus cómplices. Pero, además, reveló la presunta identidad del cabecilla de una organización criminal que ordenó la ejecución de su rival, Israel San Román Doroteo, ‘La Tota’, y de cinco familiares que lo acompañaban en el vehículo que conducía.

Solari confesó que los atacantes responden a los apelativos de ‘Josecito’, ‘Bicho’ y ‘Willy’, cuyas edades fluctúan entre los 22 y 25 años. Son muy jóvenes, sin embargo, estos sujetos cuentan con un amplio registro delictivo, por lo que los agentes de la División de Investigación de Homicidios, de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri), pudieron determinar de quiénes se trataba.

‘Josecito’, ‘Bicho’ y ‘Willy’ son conocidos por sus actividades como gatilleros de las organizaciones criminales que se disputan el control y cobro de cupos de los falsos sindicatos de construcción civil en el Callao y en Lima.

Son especialistas en secuestro, robo a mano armada, extorsión y sicariato.

El jefe de la División de Investigación de Homicidios, coronel PNP Víctor Revoredo Farfán, explicó a La República que los sicarios ‘Josecito’, ‘Bicho’ y ‘Willy’ fueron los que participaron en el asesinato de Israel San Román Doroteo, su esposa Estrellita Tapia Guerrero, sus dos menores hijos y sus padres Elías San Román Padilla y Luisa Doroteo Cervantes cuando iban a bordo de un automóvil Honda Civic de placa A6G-411.

Durante el interrogatorio, José Carlos Solari Pozu dijo a los agentes de la División de Homicidios que el primero en bajar del auto fue ‘Josecito’, luego lo hizo ‘Bicho’ y el tercero fue ‘Willy’. Todos estaban armados y corrieron hacia el vehículo de San Román, aprovechando la luz roja del semáforo.

Según el relato de Solari, había un cuarto hombre armado que quedó en el auto, mientras sus cómplices consumaban el hecho. Su tarea consistía en actuar como contención. Es decir, cubrir la fuga de sus cómplices en caso apareciera la policía. Según la delación de Solari, se trata de ‘Jachi’, otro prontuariado hampón.

Esta versión fue corroborada por las imágenes de las cámaras de seguridad proporcionadas por el municipio de San Miguel, que registraron paso a paso el momento en que los sicarios ‘Josecito’, ‘Bicho’ y ‘Willy’ descendieron rápidamente del vehículo que se estacionó en sentido contrario por la avenida Riva Agüero y se dirigieron hacia el auto blanco de la familia San Román.

En las imágenes se observa cuando los pistoleros ‘Josecito’ y ‘Bicho’ abrieron fuego primero contra Israel San Román, que iba en el volante del auto. Mientras que ‘Willy’, que vestía polera blanca, se encargó de rematar al objetivo y disparar indiscriminadamente contra toda la familia, sin importarle que había dos menores de edad.

Incluso las cámaras de seguridad registraron cuando el sujeto ‘Willy’ ingresó parte de su cuerpo en el interior del vehículo para acabar con la vida de la familia y asegurarse de que no quedara ningún sobreviviente.

Milagrosamente el hijo mayor de los esposos San Román Tapia resultó ileso, luego de escapar del sangriento atentado.

Los detectives de la División de Investigación de Homicidios no descartan la participación de otro vehículo de contención que los esperaba a pocos metros de la escena del crimen.

Para confirmar la versión, la Policía ha requerido a los negocios cercanos al lugar del crimen los videos de sus cámaras de seguridad. El centro comercial Plaza San Miguel, que se encuentra al costado de donde se produjo la matanza, cuenta con numerosas cámaras de vigilancia.

Con el testimonio de José Carlos Solari y el trabajo de campo de los detectives de la División de Investigación de Homicidios, la resolución del crimen de Israel San Román y su familia ha avanzado satisfactoriamente.

“Si bien es cierto que los sicarios ya fueron identificados plenamente, su captura es cuestión de tiempo”, indicó el jefe de Homicidios: “Todo nuestro esfuerzo se concentra en alcanzar ese objetivo”.

El coronel Víctor Revoredo precisó a este diario que la muerte de la familia San Román tiene todas las características de un crimen por encargo y obedece a un típico ajuste de cuentas entre bandas rivales por la disputa de los cobros de cupos por las obras de construcción civil en el Callao y Lima.

También anotó que Israel San Román Doroteo y su cónyuge Estrellita Tapia Guerrero fueron blanco de anteriores intentos de homicidio de organizaciones criminales rivales. Lo que es un indicativo de que existía una guerra declarada por el dominio del negocio ilícito de las extorsiones.

Cinco veces intentaron matarlo

Israel San Román Doroteo, alias ‘La Tota’, contaba desde hace más de una década con un temible prontuario policial por los delitos de usurpación agravada, estafa, extorsión y hurto agravado.

También se había convertido en el blanco de las mafias que operan en el Callao. Sus adversarios intentaron asesinarlo en cuatro oportunidades.

El 30 de diciembre del 2022 fue el penúltimo intento. Dos sujetos le dispararon cuando se encontraba en la puerta de su casa, junto con su esposa, en la calle Los Laureles, en la urb. Pando, San Miguel. Pero solo fue herido. En la quinta ocasión, sus enemigos no fallaron.

Este artículo fue publicado inicilamente por La Republica.