El diario El Comercio publicó este viernes que Marcelo Odebrecht admitió -durante interrogatorio en Brasil- haber financiado la campaña electoral del 2011 de Keiko Fujimori. El ex CEO de la constructora brasileña agregó que podría tratarse de $500 mil dólares, aunque señaló que monto debe ser corroborado por Jorge Barata, ex representante de la compañía en Perú.
Tras el escándalo, la lideresa de Fuerza Popular publicó un video en su cuenta de Facebook donde niega tajantemente las acusaciones hechas en su contra e, incluso, anuncia que denunciará al diario El Comercio por el delito de difamación.
Respuesta de El Comercio - Editorial
Publicado este 11.11.2017
Ayer el titular principal de nuestra portada decía: “Odebrecht afirma que financió campaña de Keiko”. En los subtítulos anotamos dos cosas más: que el mismo Odebrecht decía que los detalles los conocía Jorge Barata pero que él tenía la certeza de que los aportes se produjeron; y que había aseverado también que las empresas con las que se consorció en el Perú conocían de los pagos, precisando que él tenía una relación especial con Graña y Montero.
Nos ratificamos en lo dicho.
Como consecuencia de esta publicación, la señora Keiko Fujimori divulgó un amenazante video en el que, entre otras cosas: 1. Nos acusó de mentir. 2. Nos acusó de hacerlo en razón de la ‘vinculación’ de los “señores Graña” con el Diario. 3. Dijo que tenía certeza, a través de sus abogados, de que el señor Odebrecht no había dicho lo que señalamos. 4. Acusó a parte del Ministerio Público de perseguir con afán político a algunos mientras blinda a otros. 5. Dijo que nos denunciará penalmente por difamación. 6. Dijo que solicitará formalmente a la fiscalía hacer pública la transcripción del interrogatorio al señor Odebrecht.
Creemos que la argumentación de la señora Fujimori es más reveladora de la situación en la que ella parece sentirse que de cualquier acto nuestro. La lideresa de Fuerza Popular implica que nuestra forma de proceder obedece al propósito de defender a la empresa Graña y Montero. Esto, porque el ex presidente de la misma José Graña Miró Quesada es accionista de El Comercio. Y lo mismo estuvieron repitiendo incesantemente a lo largo del día sus correligionarios, en un auténtico caso de una portátil intentando silenciar una portada.
Mal día escogieron para hacer esa argumentación –salvo, claro, que lo hayan hecho bajo presión y sin muchas opciones–. Como hemos consignado arriba –y como podrán comprobar quienes lean este editorial en su edición web–, la misma portada donde se consignaba lo dicho por Odebrecht sobre Keiko Fujimori señalaba lo que dijo sobre Graña y Montero: que, al igual que todos sus consorciados, conocía de sus prácticas.
¿Están confiando en el fútbol los señores de Fuerza Popular para coger desprevenidos a quienes los oyen?
Tampoco es el caso que cualquier otro día hubieran podido imputarnos este móvil para nuestra supuesta mentira. Al menos no de buena fe. Como les debe constar a quienes nos leen, este Diario no solo ha publicado todas las acusaciones hechas contra Graña y Montero desde que estalló el escándalo de Odebrecht, sino que ha editorializado pidiendo investigar a todas las empresas consorciadas con la constructora brasileña, comenzando –con nombre y apellido– por Graña y Montero.
No solo eso: en el empeño de exponer la naturaleza de mito urbano del ‘argumento’ del que ahora se intentan aprovechar la señora Fujimori y sus voceros, hemos dado a conocer en un editorial que el señor José Graña, junto con sus hijas, suma en total el 6,17% del capital de esta empresa y es solo uno de 243 accionistas.
Llama la atención, de otro lado, que en su mensaje la señora Fujimori haya aclarado airadamente que ella no se ha reunido con el señor Odebrecht y que tampoco lo conoce. ¿Quién ha afirmado lo contrario? ¿Por qué refutar cargos que nadie le ha imputado? ¿Está intentando la señora Fujimori de ‘aguar la sopa’ para que lo recogido en el titular parezca menos consistente?
No podemos dejar de notar, por lo demás, que resulta un tanto paradójico que la ex candidata presidencial hable de “grupos de poder”, cuando su bancada no solo constituye la mayoría absoluta del Poder Legislativo, sino que viene usando la fuerza que ello supone de una manera a menudo reminiscente de tiempos pasados que, hasta donde se sabía, todos queríamos dejar atrás. La última de esas exhibiciones ha consistido en el intento de avasallar al fiscal de la Nación, para dictarle cómo debe hacer su trabajo, llevándolo con denuncia constitucional a una comisión del Congreso que Fuerza Popular maneja.
Nosotros, por nuestra parte, no tenemos más poder que el que, día a día, deciden prestarnos nuestros lectores. Y por lo que les debemos a ellos, no nos dejamos amedrentar por políticos amenazantes.
Sostiene, en fin, la señora Fujimori que exigirá hacer público todo lo que el señor Odebrecht dijo en la audiencia del jueves. Nos unimos a su pedido.