CHINCHA ALTA - Detienen venta de carne en rechazo a demolición del Camal Municipal. Comerciantes de los centros de abasto se plegaron de esta manera a la protesta de los trabajadores del centro de beneficio municipal

Los comerciantes que se dedican a la venta de carne de porcino, ovino y bovino en el Mercado de Abastos de Chincha dejaron de abastecer la mesa popular. Ellos se sumaron al reclamo de los trabajadores que están en contra de la demolición del Camal Municipal.




Además anunciaron que se mantendrán con esta medida de protesta hasta que el gobierno local planteé una solución para realizar la matanza de animales.

En otros centros de abastos, las amas de casa encontraban carne, pero con un precio excesivo.

Algunos comerciantes denunciaron que estos abastecedores no solo estaban lucrando con la situación sino que también estarían atentando contra la salud pública al ofrecer carne que no contaría con la garantía del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (SENASA) pues los animales -refieren- fueron sacrificados en centros clandestinos.

Ganaderos

 La Asociación de Ganaderos no acepta que la Municipalidad Provincial de Chincha proceda con la demolición del Camal Municipal. Durante una vigilia que se realizó en la víspera, uno de los directivos refirió que de hacerse el retiro de la infraestructura se quedarán sin puestos de trabajo, ya que el centro alterno para el beneficio de los animales vacunos, caprinos, ovinos y porcinos que se construye con inversión privada aún no esta culminado.


“Es un abuso ante todos nosotros. No nos vamos a quedar atrás vamos a seguir con todos nuestros asociados. La decisión es no dejar que demuelan este Camal, porque este Camal recibe a miles de trabajadores y a donde vamos a trabajar nosotros”, manifestó un asociado. Cabe señalar que la asociación ganadera ha recurrido a instancias judiciales para evitar la demolición de esta infraestructura municipal.

Trabajadores del Camal

Ayer en la mañana trabajadores del camal Municipal de Chincha, se apostaron en el frontis de su local para decir no a la demolición que pretende hacer el alcalde provincial César Carranza Falla.

Son un gran número de familias que se quedarían sin fuentes de ingreso por lo que manifiestan que es una medida abusiva y arbitraria por cuanto no se ha previsto otro lugar adecuado para el sacrificar ganado vacuno, porcino, caprino así como aves y otras variedades aptas para el consumo humano.