Está claro, como el agua del puquio, que la familia Gómez no ve ni el color de los miles de millones de soles que el ejecutivo transfiere al gobierno regional de turno de Huancavelica desde hace 20 años. Así va la vida en la Tierra del Mercurio, foco de las desigualdades.
En el mundo rural andino, para los criadores de alpacas, ovejas o vacas, era costumbre llevar el ganao a las alturas en busca de nuevos pastos, se alojaban en chozitas temporales que muchos lo situaban bajo las gigantescas piedras o cuevas para protegerse de las lluvias torrenciales, truenos, relámpagos, pero era solo por pocos días.
¿ La familia Gómez recibirán los diferentes Bonos del Midis?
HUANCAVELICA | Una pareja de esposos y sus cinco menores hijos al no tener donde vivir convirtieron una cueva en su hogar en lo alto de un cerro de una zona alejada del distrito de Vilca, en la provincia y región de Huancavelica.
Los agentes de la comisaría de Moya patrullaban por los cerros del sector de Jala del anexo Campo Alegre del distrito de Vilca, en Huancavelica, cuando se percataron a los lejos de un grupo de personas y pensaron en un primer momento que se trataba un grupo de ‘caminantes’ que buscaba retornar a zona de origen al no poder afrontar la cuarentena por la pandemia del coronavirus.
“Estábamos patrullando las alturas del cerro cuando encontramos a una pareja de esposos y sus cinco hijos”, dijo un agente de la comisaría de Moya.
Luego de ascender por la empinada zona llegaron hasta la cueva y vieron a esta familia ermitaña cuando dormían sobre unos pellejos de animales.
Los agentes comprobaron que la familia Gómez Vilcañaupa no tenían alimentos. Luego de sostener una larga conversación con el padre de familia le prometieron que volverían para apoyarlos.
Al día siguiente, los agentes llegaron con alimentos, ropa, frazadas y colchones para los esposos y sus hijos. Pero no solo eso. Los efectivos limpiaron la cueva y construyeron otro ambiente de material rústico.
Juvenal Gómez Vilcañaupa, y su esposa se quedaron sorprendidos por esta ayuda. Las agentes femeninas bañaron y peinaron a los menores de 6, 8, 12, 15 y 1 año.
“Es una familia pobre que necesita más ayuda”, dijo el comisario de la delegación de Moya, brigadier PNP Iván Lecca, quien le colocó a cada uno las mascarillas para protegerse del coronavirus.
Fuente: Correo
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