Por: David Auris Villegas - Escritor/Pedagogo

A pesar que la humanidad vive su mejor época, según Yuval Harari,  los “líderes políticos” y los silencios de algunas personas están hipotecando y estropeando la marca Perú, saltando a la vista esta interrogante difícil de responder pero no imposible de afrontar con las herramientas que la inteligencia ha permitido construir, entre ellas, la pedagogía ética, ¿El comportamiento antiético, lobista, inestable y calculador  de los ex presidentes y líderes políticos y aquellos quienes hacen política partidaria está dañando la imagen peruana ante la comunidad internacional?

     Al respecto observamos en el teatro de operaciones, la mayoría de políticos de diferentes agrupaciones políticas, quienes no superan el 25% de aprobación según Ipsos, publicado este junio pasado, están operando con una increíble actitud prepotente carente de ética y respeto a las personas y la democracia, ejerciendo valores prácticos como sostenía Luis Alberto Sánchez, haciendo inviable construir una imagen de credibilidad internacional sostenida; según Transparencia Internacional, nuestra empresa nacional denominado Perú, continua desaprobado, carcomiendo su imagen endeble, limitando las inversiones extranjeras y creando una suerte de espanto, dañando la imagen a aquellos y a aquellas personas quienes viajamos al extranjero en busca de crecimiento personal y profesional con el objetivo de vender y convertirnos embajadores de la marca Perú.


 

No lejos de un destino trágico griego, sostenemos atrevidamente que nadie es acusado o está preso por su inocencia, sino porque algo deshonesto ha cometido, como el caso de los ex presidentes que arremetieron sin desparpajo contra nuestro país: Alberto Fujimori fue sentenciado a 25 años por su responsabilidad de delitos de asesinato y actos de corrupción que apenas purgó poco más de 10 años y fue indultado en medio de un escándalo social, Alejandro Toledo con orden de captura, junto a su esposa se encuentran prófugos y esperan ser extraditados por actos de corrupción, Alan García está siendo investigado desde hace más de 25 años por actos de corrupción, Ollanta Humala y su esposa estuvieron presos por más de nueve meses por actos de corrupción, Pedro Pablo Kuczynski fue destituido del gobierno por actos de corrupción y viene siendo investigado, ¡Aunque muchos no lo crean!, incapaces de aceptar sus errores, todos ellos se declaran inocentes; dando pie a otra interrogante a partir de esta clase de gobernantes, cuyos objetivos fueron servirse del país, ¿podremos vender  exitosamente nuestra  marca Perú a nivel planetario?, probablemente no.

     Ante esta situación escalofriante digno de una película de Alfred Hitchcock, es urgente desplegar una educación conscientizadora desde el enfoque de la pedagogía ética en los espacios del hogar, la sociedad y a lo largo de toda la formación que brinda el sistema formal, desde el nivel inicial hasta los postgrados y formular estándares elevados de control de calidad ética a aquellos y aquellas  quienes pretenden ejercer la política partidaria para convertirse en funcionarios públicos, evaluando rigurosamente su vida personal y pública, como el logro de una familia constituida,  su responsabilidad social, un antecedente pulcro a lo largo de su vida; utilizando herramientas convencionales y los software que la tecnología nos hace posible.

      Finalmente, a pesar que los últimos ex presidentes han perjudicado con esas actitudes negativas, la marca Perú; nosotros los insobornables ciudadanos y ciudadanas conscientes, estamos llamados a librar batallas cotidianas, desde nuestro sencillo puesto, haciendo de este país, más grande y solidario en el concierto mundial, legando muchas oportunidades y posibilidades a las futuras  generaciones por venir.

 

Fuente: https://www.kbook.com.br/livraria/wp-content/uploads/2016/11/Mafalda-848x400.png (20/10/18)

 

Huamatambo, octubre 20 de 2018