¿Podrá ser un presidente honesto y honrado, una persona que tiene acusaciones de corrupción por apropiación ilegal de terrenos en el distrito de Acora, Puno, cuando era jefe del Proyecto Especial Pasto Grande?
¿Podrá ser un Presidente confiable, una persona que sabiendo que la construcción el aeropuerto de Chincheros defraudaba al Estado, sin escrúpulos insistió, al estilo de los kenjivideo, Junto a Zavala, para que éste se diera a toda costa, cuando fue Ministro de Transportes y Comunicaciones? ¿Podrá ser un Presidente pacificador, una persona que enfrentó a dos regiones (Puno – Moquegua) por un problema de límites que él mismo provocó? ¿Podrá ser un Presidente justo, una persona que cuando era Vicepresidente del Perú, se parcializó para favorecer a la región Moquegua sobre unos terrenos que no les correspondía? Y finalmente ¿podrá ser un Presidente confiable, una persona que PPK defendió y presentó como uno de los hombres más honestos que había conocido?
Por donde se mire, Vizcarra es afín a PPK, es su discípulo de empresa, huele a él, y, como él, no reúne ni el más mínimo requisito para ser Presidente de la República. Aunque joven, no es la cara nueva que el pueblo espera. La clase política actual y los medios de comunicación limeños, son los únicos que están con él, porque previsiblemente, Vizcarra, resulta ser el único con el perfil, de cuervo en silencio, que salvaguardará la forma corrupta con que se aprovechan y aprovecharon de los recursos del estado.
La salida de PPK, las aventuras de Moisés y los enjuagues de boca de Barata, no han hecho más que confirmar lo que ya todos sabíamos: que la clase política está en un estado de putrefacción avanzado: hediondo. Porque no podemos olvidar que todos, absolutamente todos los políticos, tuvieron un amor pasajero con alguien, que les llevó hacer leyes para su provecho, o les hizo engañar a favor de empresas, o les hizo ricos de la noche a la mañana, o les hizo mentir o abstenerse para favorecerse. Fue un amor ardiente, que disfrazado de democracia, parlamentarismo, leyes, decretos, cumbres, y diez mil enredos más que la historia sabe, hizo que la población de este país este al borde del suicidio, caminando por el borde de una trocha fangosa, diseminado de cadáveres.
Y con todos estos cortes de ladrón de los 90, los mequetrefes del Congreso, de los medios de comunicación limeños y de la CONFIEP, conjuntamente con sus analistas trasnochados, insisten en el descaro de recomendar e imponer que Vizcarra debe gobernar hasta el 2021. La respuesta es, sin embargo, que así se mantuvo siempre la tara centralista del país: La jauría política, sus amigos adinerados y sus avengers, siempre han logrado imponer su posición y que las provincias acaten. Y a pesar de que varias veces pasó esto, la posición provinciana jamás pudo imponerse y transformó su carácter rebelde, en un ladrido de perro wawa, que no asusta, ni protege lo que le pertenece.
Pero ahora es otro tiempo, por eso los mequetrefes vociferan en cuanto espacio pueden para convencer. Entre ayer y hoy, por ejemplo, todos los analistas y congresistas han visto el futuro de Vizcarra: Lo han visto como el más idóneo para el cargo, como el líder que el Perú buscaba, que como había egresado de la UNI es obvio un buen gobierno. Pero todos sabemos que esto no es verdad, que Vizcarra tiene la misma estirpe de traidor, arribista y convenido de los que hoy le auguran buenas nuevas. No por nada pasó de ser un búfalo Aprista a ser un callado Pepekausa.
Yo digo para mí: ¿Eso se quiere como Presidente, un advenedizo con suerte que se honra a sí mismo por haber delinquido moralmente y que solo escucha a sus socios para saber cómo pueden aprovecharse del estado? Por todo esto, la consigna es: “¡Adelanto de elecciones y que se vayan todos!”.
Fuente: Hildebrandt en sus 13, 22 de marzo del 2018
NOTA BENE: La analogía del canario se usa prolijamente en la comunicación politica para hacer advertencias de peligros inminentes. Como se sabe, los mineros hasta bien entrado el siglo XX llevaban consigo al socavon un canario. Como no existía ninguna tecnología capaz de advertirles de la peligrosa presencia de gases como el metano o el monóxido de carbono que podía ocasionarle consecuencias fatales al inhalarlos, ellos utilizaban un canario para ese fin.
Los canarios son pájaros altamente sensibles y reaccionan con histéricos aleteos y finalmente con la muerte al entrar en contacto con concentraciones de esos gases tóxicos. Es por eso que los mineros bajaban con un canario en una jaula y si el pajarito empezaba a aletear de manera incontrolada los trabajadores sabían que era el momento de salir del socavon. Asi los canarios se convirtieron en un mecanismo de alarma que salvaba muchas vidas humanas. Algo asi como la luz roja del semáforo o como un limite que no se debe traspasar.o de la presencia de cosas que se debe evitar
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