Oswaldo Carpio Villegas - Profesor en Marketing

El objetivo del gobierno del presidente Martín Vizcarra, en palabras del Presidente del Consejo de Ministros, César Villanueva es mejorar la calidad de vida de los peruanos, un país que incluya y no divida. Afirma que es necesario retomar el crecimiento económico y cerrar las distorsiones que hoy traban la economía peruana.

La estrategia política expresada en el discurso ante el Congreso es dialogar, buscar acuerdos, generar consensos, terminar con los antagonismos (los “antis”) y dar pasos firmes en la descentralización bajo la idea de que este será un Gobierno de y con las Regiones y, también de los Gobiernos Locales.

Los objetivos económicos del gobierno hacia el 2021 son:

- Crecimiento del PBI de 2,5% el 2017 a 5,00% al 2021.
- Reducción de la pobreza de 21,7% en el 2017 a 18% en el 2021.

Se trata de objetivos que se aproximan al potencial actual de la economía peruana pero que no apuntan a un crecimiento que supere el 7%. El gobierno de Martín Vizcarra ha heredado una economía en estado grave manifestada en una desaceleración que ha afectado a todos los sectores productivos y al empleo, creando 375 mil pobres. Se ha quebrado, así, casi dos décadas de lucha exitosa contra por disminuir la pobreza en la que no se percibe un cambio sustantivo de estrategia. No se cuestiona la política unilateral de “incluir para crecer” por una política holística como “crecer para incluir e incluir para crecer”.

Luchar por superar la pobreza implica dos cosas: crecer e incluir e incluir para seguir creciendo. Esta política afirma el crecimiento económico que genera empleo e ingresos y, también, excedentes, que se pueden destinar a luchar contra la extrema pobreza. La verdadera lucha contra la pobreza es generar empleo y eso es posible inversión privada, motor de la economía en cualquier país próspero del mundo.

Simultáneamente, el gobierno está obligado a reducir el déficit fiscal superior al 3% hacia el 2021. En los últimos años ha crecido el Presupuesto Nacional sin crecimiento de los ingresos lo que ha generado un peligroso déficit cubierto con endeudamiento, emisión de bonos que están financiando los Panamericanos, la Reconstrucción con Cambios, la refinería de Talara entre otros proyectos. El endeudamiento para cubrir el déficit es una política errónea si, simultáneamente, no se generan las condiciones para acelerar la inversión privada y pública. Los últimos años disminuyeron los ingresos y la inversión privada

El gobierno ha propuesto aumentar la presión tributaria hasta la meta de 15,3% en el 2021, un aumento de 2,4% en el afán de cubrir el déficit con nuevos ingresos sin aumentar las tasas. Se impulsará la facturación electrónica para todos y un enfrentamiento a la elusión y evasión. También debería haber señalado la lucha contra el contrabando, la minería informal y la ilegal e informal explotación forestal, entre otros.

Simultáneamente, el gobierno propone inversiones por un monto de 180MIL MILLONES de soles hacia el 2021. Esto implica una expansión de 17,5% de la inversión pública en el 2018 comparada con el año 2017.

 

La reactivación de la inversión pública está sustentada en una estrategia de fortalecimiento de la descentralización y una mayor inversión de los Gobiernos Regionales y Locales. La propuesta descentralista se expresa en tres políticas: 1)Fortalecer la descentralización en un enfoque de desarrollo territorial que reconozca las diversidades y las vocaciones de cada región. 2) Eliminar las superposiciones, ambigüedades y omisión de funciones en los tres niveles de gobierno. 3) Revisar la desconcentración administrativas de las oficinas y programas nacionales en el las regiones.

El gobierno ha aprobado invertir en lo que resta del año dos mil millones de soles a través de los gobiernos regionales. Asimismo, invertir este año, 4 mil millones de soles en la Reconstrucción y 25 mil millones más hasta el 2021. Se trata de obras definitivas en 19 ríos, 5 quebradas, drenaje pluvial en siete ciudades y recuperar 45 mil viviendas. Se buscará reducir a 13 meses el tiempo de ejecución de los proyectos e invertir 1800 millones de soles en cinco grandes proyectos en marcha.

En cuanto a la inversión privada se buscará la inversión por un monto de 10 mil millones de dólares en tres proyectos mineros: Quellaveco en Moquegua, Mina Justa en Ica y Toromocho en Junín. El Perú es un país minero y es posible con políticas firmes y buena comunicación que esa cifra aumente significativamente. Eso dependerá del liderazgo.

Se promoverá a las MYPES haciendo compras por 400 millones de soles por el Estado.

La meta es que la agro-exportación alcance 7 MIL MILLONES en el 2018 y 10MIL MILLONES en el 2021.

El gobierno ha pedido facultades en materia tributaria y financiera; de gestión económica y competitividad; reconstrucción y cierre de brechas en infraestructura y servicios; integridad y lucha contra la corrupción; prevención y protección de personas en situación de violencia y vulnerabilidad; y de modernización de la gestión del Estado. El gobierno tiene tres años y dos meses por delante. El país clama unidad. Un país desgastado en disputas, crispado y enfrentado no tiene porvenir. Luchar contra la corrupción es clave porque atenta contra la estabilidad del país, destruye la moral nacional, aniquila los recursos públicos y es una afrenta en la lucha contra la pobreza. Estamos en un momento crucial: derrotar la crisis de un país de renta media. Si salimos de este momento podremos proyectarnos al futuro.