|
---|
Mientras el mundo desaparece en envolturas de chocolates, flores y extrañas promesas de amor.
En la medianoche del 14 de febrero, mi lindísima enamorada, al otro lado del continente, recogía con rebosante alegría su dilatado regalo.
Muy feliz y ansiosa por estrenar su sorpresa, me preguntó al teléfono:
- Amor ¿Cuál sería tu mejor regalo?
- Le dije. Mi mejor regalo se abrevia a un abrazo entrañable, tu sublime fidelidad y una maravillosa sinceridad.
Al escuchar mi extravagante deseo, prontamente me envió su despampanante pijama inglés, bordado con un lindo verso de tres palabras.
@davidauris |
Recibe las últimas noticias del día