Por: David Auris Villegas  Escritor/Poeta davidauris@gmail.com https://orcid.org/0000-0002-8478-6738

Por esas cosas de la vida me acercó a los cincuenta: soltero, sin hijos y sin ganas de compartir la contraseña de mi Facebook. Unos días antes de mi cumpleaños, me reuní con mis siete cuñadas y, por curiosidad, les pregunté cómo les iba en sus matrimonios, solo para saber qué maravillas estaba perdiéndome.

Al instante, todas me respondieron en coro:"¡Tomaste la mejor decisión de tu vida al no casarte!". Me quedé en shock. Yo esperaba escuchar una lluvia de flores, promesas de amor, locos besos al despertar y desayunos en la cama, pero nada de eso.

Intrigado, les pregunté el motivo de semejante respuesta. Una de ellas dijo que hacía siglos no sabía lo que era un beso amoroso. Otra confesó que el sexo ya se había vuelto automático. Y todas coincidieron en que lo único que ahora las ilusiona son sus hijos.

Después de escuchar ese concierto de verdades crudas, sentí un alivio inmenso. Yo, que practico el amor libre desde los 18, por un momento había considerado casarme. Con esta información de primera mano, me asalta una nueva preocupación: ¿Cómo le explico a mi novia que, después de reunirme con mis cuñadas, me volví más soltero que nunca?

© David Auris Villegas. Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCPCE.