LIMA - Luego de varios días de coordinaciones, finalmente el Arzobispado de Lima y el Gobierno peruano llegaron a un acuerdo para la sede de la misa que el papa Francisco ofrecerá el 21 de enero del 2018 en Lima. Será en la Base Aérea Las Palmas, en Surco.

El anuncio fue realizado por el presidente de la República, Pedro Pablo Kuczynski, el arzobispo de Lima, cardenal Juan Luis Cipriani; y el ministro de Trabajo y Promoción de Empleo, Alfonso Grados, en conferencia de prensa.

Inicialmente, la Conferencia Episcopal Peruana informó que la sede oficial para evento litúrgico era la Costa Verde. Esta había sido visitada y autorizada por representantes del Vaticano.

Sin embargo, la seguridad de este espacio, entre los distritos de Magdalena y San Miguel, fue cuestionada por el Ministerio del Interior debido a la falta de rutas de salida ante casos de emergencia como un sismo y tsunami.

Durante la conferencia, Grados manifestó que la Base Aérea de Las Palmas brinda las condiciones de seguridad para que el evento se desarrolle de manera ordenada y sin poner en peligro a las familias peruanas que asistan.

“(Cuenta con) accesos adecuados para todos los ciudadanos, rutas de evacuación seguras para casos de emergencia, disponibilidad de espacios accesibles para personas con discapacidad o adultos mayores”, señaló.

En esa línea, se trabajará con los Gobiernos Locales, Defensa Civil, Indeci y la Policía Nacional para concluir con la adecuación de las instalaciones de Las Palmas.

El aeródromo de Las Palmas, propiedad de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), tiene unas 170 hectáreas de terreno y de ellas 27 están disponibles, incluida la pista de aterrizaje. Por su extensión, allí podrían congregarse cerca de dos millones de personas.

Respecto a los accesos, el alcalde de Surco, Roberto Gómez, informó que a la base aérea se puede ingresar a través de las vías de tres distritos (Surco, Barranco y Chorrillos) y que las condiciones de seguridad son buenas.