El Candelabro de Paracas, Patrimonio Cultural de la Nación ubicado en la región Ica, luce un "manto de nieve" como parte de un proceso natural registrado tras las intensas lluvias, pero este se desvanecerá y el enorme geoglifo recuperará su textura natural.
Así lo explicó el
jefe de la Reserva Nacional de Paracas, Gonzalo Quiroz, al indicar que, desde el mediodía del jueves, "la formación salitrosa forma parte del paisaje de El Candelabro".
El denominado 'manto de nieve´que luce El Candelabro de Paracas es parte de un proceso natural tras las lluvias intensas, pero se disipará y el enorme geoglifo recuperará su textura natural.
El miércoles pasado se registraron precipitaciones de regular intensidad, que duraron aproximadamente tres horas, en el litoral costero de la región Ica.
"Esto hizo que la zona de desierto se humedezca y al día siguiente, que salió el sol, por la evaporación se arrastraron las sales naturales del suelo y se formó una costra blanca en la superficie de El Candelabro y el sector de la reserva, que comúnmente la gente lo denomina 'manto de nieve'", detalló.
Descartan afectación
Quiroz aseveró que "
no podemos hablar de una afectación, porque es un proceso natural, no es típico de la zona, más bien es atípico".
"Este evento, que ha recubierto de sal, por los mismos procesos de erosión naturales de los vientos van a recubrir nuevamente El Candelabro y este retomará su coloración natural, que es la arena", sostuvo a funcionario.
Aclaró que
no se puede determinar una fecha exacta en la que El Candelabro de Paracas recuperará su coloración natural. "Hay que esperar a la naturaleza ponga las cosas en su sitio", puntualizó.
"Estamos en una zona con presencia de vientos, por eso se denominan Paracas, porque es lluvia de arena. En cualquier momento pueden haber vientos Paracas y recubrir nuevamente El Candelabro", manifestó.
El funcionario indicó que
"no hay registro de un fenómeno similar" y que el anterior episodio fue hace unos cuatro a cinco años.
Patrimonio
El Candelabro de Paracas es una imagen de tamaño colosal dibujada sobre la cambiante superficie de arena de la Reserva Nacional de Paracas, en la provincia iqueña de Pisco.
El Ministerio de Cultura le otorgó, en el 2016, el reconocimiento de Patrimonio Cultural de la Nación, por ser una expresión de obra de arte en un espacio físico natural con valores históricos, tanto por la cronología como por el enigma de su origen.
Ubicado al noroeste de la bahía de Paracas, El Candelabro tiene una extensión de 170 metros y una profundidad promedio de 1.20 metros. Se cree que tiene relación con las Líneas y Geoglífos de Nasca y al igual que estos se desconoce su origen.
Fuente: Andina