Ica, conocida como la ciudad del eterno sol, se muestra orgullosa por sus famosos vinos, y también por la laguna de la Huacachina, un oasis natural en medio de las dunas de arena. Pero una dramática situación trasciende en este departamento: el ascendente número de homicidios, muchos vinculados al sicariato, que lo han llevado a ser considerado la tercera región más peligrosa del país.

Hay quienes incluso la llaman ‘la Sinaloa del sur’.

De acuerdo con un informe del Ministerio del Interior, Lima encabezó el año pasado la tasa de criminalidad con 540 asesinatos en contextos vinculados a organizaciones criminales, actividades económicas ilegales, ajuste de cuenta y venganza. Le siguen La Libertad con 160 homicidios e Ica con 110 muertes violentas.

Este año, la ola de crímenes no se detiene en Ica. “Acá encuentras sicarios en cualquier parte”, cuenta una tía de Víctor Manuel Mundini Heredia, de 39 años, un jalador de turistas muy conocido en la reserva natural de Paracas, zona protegida por su diversidad ecológica y de ecosistemas marinos.

Detrás de su asesinato, cometido el 13 de enero frente al terminal pesquero de Pisco, se esconde una historia de violencia que desde hace más de quince años ha dividido a una familia en la caleta Lagunillas. Hasta el momento, no hay detenidos.

De los 110 asesinatos en Ica, 60 fueron cometidos en Pisco. En el 2022 murieron en esa zona 57, convirtiendo a esa jurisdicción en una de las provincias más peligrosas del Perú.

Víctimas. Víctor Mundini era muy conocido en la reserva de Paracas. Al lado, el suboficial Ronaldo Lupaca, quien murió al frustrar un robo. Dos crímenes sin justicia.

Reina la impunidad

Diez días después de que fuera asesinado Mundini, cuatro miembros de una familia, entre ellos, un menor de edad, fueron encontrados sin vida en el distrito de Chanquillo, en Nasca.

Pedro Flores Palacios, quien se desempeñaba como teniente gobernador del sector, fue victimado junto a sus hijos Pedro y Merli, y a su nieto P. C. F. (16).

Don Pedro era reconocido por su larga trayectoria laboral en la empresa Shougang Hierro Perú, en el área de embarque San Nicolás, en Marcona, y fue hermano de Jorge Flores Palacios, una figura destacada en Nasca. Hasta el momento tampoco se ha encontrado a los responsables de este cuádruple asesinato.

Los grupos criminales

A la par de su desarrollo agroexportador, en Ica operan a sus anchas, desde el 2020, grupos mafiosos como ‘Los Colochos del Sur’, ‘Los Usureros de Ica’, ‘Los Al Kaeda de Chincha’, ‘Los Injertos Perú-Chamos del Sur’, ‘Los Topos de Grocio Prado’, ‘Los Raqueteros de Liguria’, ‘Los Ostros’, ‘Los Robacasa de la Florida’, ‘Los Temibles del Sur’ o ‘Sicarios del Chino Mere’. Unos se dedican al préstamo gota a gota, otros al sicariato y la extorsión. Sin embargo, un delito que viene creciendo es la trata de personas con fines de explotación sexual.

Nadie está a salvo en Ica. La madrugada del 2 de febrero, el suboficial de tercera Ronaldo Lupaca Valdez fue victimado al frustrar un asalto en el fundo San Jorge. Un compañero suyo resultó herido.

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“Nuestra región, hoy, está en una situación realmente grave, violenta. No tiene punto de comparación a nivel internacional, pero hay quienes llaman a Ica la Sinaloa del sur”, remarca el periodista Carlos Falcón.

Impune. El cuádruple asesinato de Nasca sigue sin detenidos.

Tiroteos por disputas de territorios, ajustes de cuentas, conflictos personales o hechos de delincuencia común. Alrededor del 70 % de los asesinatos fueron cometidos en plena calle y el 85,6 % con armas de fuego. Las balas no distinguen clase social. Matan en el campo y en la ciudad.

PNP dice que hay 31 bandas desarticuladas

El jefe del Frente Policial Ica, general Manuel Vidarte Pérrigo, informó que en menos de dos meses la Policía desarticuló 31 bandas criminales en esa región.

Explicó que hasta el 11 de febrero ejecutaron doce megaoperativos y 2.477 operativos que permitieron la intervención de 466 personas con requisitoria vigente y se detuvieron 858 peruanos y 46 extranjeros en Ica, Pisco, Chincha, Palpa, Nasca y Huaytará.

“La Policía Nacional sigue trabajando en beneficio de la comunidad iqueña. No solo estamos trabajando en Ica sino también atacando la minería ilegal y al narcotráfico en Marcona y en Chincha”, afirmó.

El dato

Gota a gota. La gente que vive de préstamos ilegales gota a gota es la que más padece la inseguridad, porque es rehén de ella. Los comerciantes son víctimas de extorsiones y reciben amenazas; si no cumplen, son atacadas e incluso asesinadas.

Fuente: La Republica