Por: Eucadio Gutiérrez Solano
El pueblecito de San Luis de Huañupiza, perteneciente al distrito de San Juan de Yánac, tierra de los antiguos curacas: Astohuaraca y Ancoallo, celebró hace poco su fiesta patronal.
Es un pueblo progresista y de gente aguerrida. En la antigüedad fue eminentemente una zona agrícola y de pastoreo.
Aquiles Jordán Peve se adueñó del lugar convirtiéndolo en una hacienda, cuyo capital fue Huanca, de donde sacaba sus productos y abundante leche, hacia Chincha Alta, por Huatianá.
Se calcula que el mejor tiempo de apogeo se produjo entre las décadas de 1930 y 1940. En 1960 ya había desaparecido dicha hacienda. Jordán Peve quiso irrigar extensas zonas al norte de Huañupiza y construyó una acequia desde el Hongorú. Lamentablemente no tuvo éxito por el retiro de las lluvias y falta de agua.
El 21 de noviembre de 1985 se inauguró la Carretera. Ese día llegaron a Huañupiza alrededor de 60 movilidades entre carros, camionetas y camiones. Fue un día de fiesta para los lugareños.
El pueblo cuenta con colegio secundario, escuela primaria e inicial. Tiene una extraordinaria loza deportiva. Sus habitantes son progresistas. En el deporte, uno de los equipos más famosos que dejó mucha historia fue “Alianza Puma”. Lamentablemente desapareció.
En el presente año la ecología de San Luis de Huañupiza, se parecía a los años de 1950 y 1960. Huañupiza tiene importantes restos arqueológicos y turísticos como Astomarca, Sillapite, Koritacana, entre otros.