ICA -
El Servicio Nacional de Sanidad Agraria – Senasa anunció que varios municipios distritales de la región Ica certificaron como saludables a 140 puestos de venta de alimentos agropecuarios al cumplir con los estándares sanitarios para comercialización.
La certificación los acredita como un establecimiento de garantía para adquirir alimentos inocuos, en cumplimiento de la Meta 5
‘Certificación de los puestos de venta saludables de alimentos agropecuarios primarios y piensos en mercados de abastos’, del Programa de Incentivos a la Mejora de la Gestión Municipal.
Dieciséis gobiernos distritales están realizando la certificación, entre ellos, Ica (41), Tinguiña (3), Pachacutec (2), Parcona (4), Santiago (1), Subtanjalla (3), Tate (2), Chincha Alta (47), Alto Larán (1), Grocio Prado (3), Pueblo Nuevo (10), Sunampe (3), Tambo de Mora (1), Pisco (10), Túpac Amaru Inca (2) y Nasca (7).
Solo los municipios que cumplan con certificar
el 30% de los puestos accederán al incentivo económico del Ministerio de Economía y Finanzas. Las certificaciones deberán continuar porque el objetivo es lograr la certificación del 100% de puestos.
Estas acciones buscan mejorar las condiciones de venta de los alimentos, a fin de proteger a los consumidores finales promoviendo un comercio responsable y el involucramiento de las autoridades locales en vigilar y mantener estas labores.
Proceso
Este proceso se realiza en cinco etapas; inició con la capacitación del personal autorizado por las municipalidades en inspecciones sanitarias, luego la conformación y capacitación al Comité de Sanitario en alimentos agropecuarios primarios y piensos de los mercados de abastos.
Posteriormente, las instituciones ediles realizaron la programación de las inspecciones sanitarias de los puestos de venta de sus mercados de abasto y/o bodegas que están en su jurisdicción; luego adoptar las exigencias sanitarias e higiene necesaria para garantizar la inocuidad de los productos, se realiza la certificación de puestos como saludables.
El ordenamiento municipal
permitirá reducir los peligros de contaminación y proteger la vida y salud de la comunidad iqueña.