Por: Montse Torras - Profesora/Barcelona

 

Ya existe un nuevo superalimento, se trata del cereal freekeh. Un grano con sabor ahumado cuya preparación es similar a la del arroz y cuyas características, además de saciantes, favorecen el crecimiento del cabello y las uñas

Los superalimentos son para las nuevas  generaciones cosmopolitas, nacidos en los 80, lo mismo que las tendencias gastro-fusion a las tribus urbanas de los anos 70. Su reinado es finito. Como el de la quinua. Este cereal de los incas se erigió desde hace un cierto tiempo como la panacea alimenticia. Antes le había tocado el turno al teff. Pero, ahora, el universo healthy ya tiene un nuevo 'dios' al que adorar: el freekeh. Un grano de trigo que se cosecha antes de que termine su proceso de maduración para, posteriormente, tostarlo.

Este producto posee una gran fama en Oriente Medio, donde se consume desde hace miles de años. Ahora, su popularidad ha conquistado Occidente gracias a los adeptos de la cultura y la alimentación biológicas ou orgánicas.

 

 

 

Precisamente, es un fantástico probiótico que cuida del sistema digestivo, ya que, entre sus beneficios, que no son pocos, presume de contar con poca cantidad de grasas y carbohidratos y facilitar el crecimiento del cabello y las uñas. Disfrutar de todos ellos es posible. La quinua cierra su particular capítulo para dejar paso al nuevo superalimento.

Estas son algunas de sus ventajas

Se trata de un alimento muy versátil cuya cocción es idéntica a la del arroz

• El freekeh se cocina de manera rápida: solo necesita 20 minutos de cocción.

• Su sabor tiene reminiscencias vegetales con un toque ahumado.

• Su textura es bastante similar a la de la cebada.

• El grano del freekeh, a diferencia del trigo maduro, conserva más proteína, fibra (hasta tres veces más que el arroz integral y el doble que la quinoa) y minerales. Es rico en selenio, potasio, magnesio o hierro.

• Es bajo en grasas y contiene almidón resistente: este carbohidrato actúa como fuente de fibra y ayuda a que la sensación de saciedad que tenemos tras comer perdure durante más tiempo.

• Contiene gluten, de ahí que no esté indicado para los celíacos.

• A la hora de cocinarlo hay que tratarlo como el arroz, el cuscús o la quinoa. Es un producto versátil que puede servir como postre añadiéndole fruta, yogur o leche.