Suramérica sería libre de cáncer de cuello uterino, ¿Quiénes lo prometen? la primera dama Nadine Heredia y el secretario de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR). Nadine se mudará de la Casa de Gobierno el 28 de julio de 2016,  y el ex presidente colombiano Ernesto Samper (1994-1998), si no es reelegido, unos días después abandonará la sede Néstor Kirchner de Unasur, en el Centro del Mundo, en Quito.

Campaña quijotesca

La campaña  “Sudamérica libre de cáncer de cuello uterino”,  desde su lanzamiento  el pasado 25 de junio, tiene un adversario, el tiempo, a menos que se adopte ese tiempo como política de Estado en  las naciones  suramericanas,  que supone la aprobación de cada Parlamento.  Samper además tiene en sus pendientes,  llevar a cabo  en América del Sur  la  lucha contra la obesidad infantil,  prevención de las enfermedades crónicas no transmisibles, lista de precios de medicamentos, establecer una fábrica de fármacos, debate sobre legalización de la marihuana,  y  mapeo de la producción de genéricos.  

Secretario de Unasur, desinformado

Samper está mal informado sobre el tema de cáncer de cuello uterino, por el Consejo sectorial respectivo. Sostiene  que el cáncer de cuello uterino causa más de 20 mil muertes anualmente, sin aclarar si es en Suramérica o en  Perú,   desde donde hizo esa declaración. En  Perú, según  el Instituto de Cancerología   se presentaron 16.000 casos nuevos.  Si hablaba de las Américas, en el 2012, según la Organización Panamericana de la Salud,  83.000 mujeres fueron diagnosticadas de cáncer cervicouterino, y  36.000 fallecieron por esa enfermedad.   Uruguay registra altas tasas de mortalidad por cáncer de mama, y  Paraguay  y Venezuela por cáncer de cuello uterino.

¿Hablar por hablar?

La campaña   “Sudamérica libre de cáncer de cuello uterino”, sería vana en la mayoría de  países de las Américas, en donde según la Organización Mundial de la Salud (OMS), “la sanidad pública  tiene capacidad suficiente para detectar y tratar el cáncer de mama y de cuello uterino”.  En Colombia, según cifras oficialas, en 1987, por cada 100.000 mujeres, 14 morían a causa del cáncer de cuello uterino; hoy mueren 7,08 por cada 100.000.