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Seis delincuentes completamente armados, ingresaron a la empresa EMAPICA y se apoderaron de varios equipos de oficina. Según primeras investigaciones los facinerosos, tomaron desprevenidos a los vigilantes, los redujeron, maniataron y se apoderaron de sus armas de fuego.
El ilícito se registró ayer a las dos de la mañana en el local de la empresa en la calle Callao. Los ladrones treparon el techo del colegio Ezequiel Sánchez Guerrero para luego ingresar a Emapica. Ni los ladridos de los perros los detuvieron y fueron directamente donde se ubicaban los vigilantes, los amenazaron con las armas, los golpearon y los maniataron.
Ya al interior del local, luego de violentar las puertas de las oficinas, los ladrones reunieron varias motobombas, computadoras de escritorio, televisores, laptop, y los colocaron en una camioneta de la empresa. De paso, a los vigilantes les arrebataron dos armas, dinero en efectivo y celulares.
Según versiones de algunos trabajadores, los delincuentes también habrían cortado los cables de las cámaras del sistema de seguridad para que no quede registrado el asalto.
Dos horas después, a las 4:30am, los delincuentes salieron del local a bordo de la camioneta de Emapica, pero en esos momentos los vigilantes pudieron desatarse y fueron tras ellos en otro vehículo.
En el seguimiento, los vigilantes averiguaron que en Plaza de Armas de la ciudad, los ladrones habían chocado la camioneta contra un auto Tico y que ante las amenazas del chofer afectado con llamar a la policía, los delincuentes le dieron uno de los televisores robados.
Los vigilantes continuaron el seguimiento hasta la Av. San Martin, donde los sujetos -al parecer ya sospechando que estaban tras ellos- abandonaron la camioneta con la mayoría de los objetos robados. Solo se llevaron lo robado a los vigilantes. Se supo además que los bandidos intentaron llevarse 20 mil soles de la caja de Empica pero no pudieron
En estos momentos se vienen realizando las investigacones del caso. Un hecho delictivo más en una ciudad que se convierte en peligrosa.
Fuente: Correo