Para Aaron E. Carroll, profesor de pediatría en la escuela de medicina de la Universidad de Indiana, el café negro es  muy saludable, y para  Damien Léger, el doctor que dirige el Centro de Investigación del Sueño en el hospital Hôtel-Dieu de París,  las siestas deberían ser un derecho fundamental, no una ostentación.

Aaron E. en un  artículo publicado en The New York Times, escribe que el consumo moderado de café —de tres a cinco tazas al día—  reduce el riesgo de enfermedades coronarias.

Basado en estudios científicos, Aaron E. desvirtúa una serie de mitos dañinos creados en torno al consumo de café. Acerca que  atrofia el crecimiento, los estudios no han podido demostrarlo, señala el articulista. Que es malo para la salud, “sucede lo contrario. Su beneficios potenciales para la salud son sorprendentemente amplios.”

Los anunciados beneficios se refieren al café negro, no a las bebidas con base de café, leche y azúcar que consumen muchas personas, indica Aarón, y agrega que casi no hay pruebas de que el consumo de café haga daño, ni tampoco  está proponiendo que  empecemos a beber café a litros, ni que comencemos darles café a los niños y niñas .

El departamento de Agricultura de Estados Unidos, (USDA) señala que el café está bien y acepta que incluso podría ser bueno.

El francés Léger piensa que las  siestas son mucho más poderosas que la cafeína, y considera en un artículo también publicado en nytimes, que debe ser  un derecho fundamental, no un pequeño lujo, y  que se debería dar a todos los trabajadores, aún a los que cumplen turnos nocturnos,  que deben tener  una almohada pequeña para la cabeza. La siesta para este científico debe durar 20 minutos, para evitar la  “embriaguez del sueño”. Una  investigación reseñada por Léger, concluye que la siesta evita la hipertensión, diabetes, depresión, obesidad, cáncer e incluso un mayor riesgo de muerte.

Respecto a la duración, investigadores estadounidenses en un estudio publicado en la revista International Journal of Behavioral Medicine, recomiendan “echarse una siesta de 45 minutos durante el día”.