Una de las muchas universidades peruanas ofrecen carrereas en medicina, odontología... y mucho más.
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Por: Eucadio Gutiérrez Solano - Profesor/Periodista
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La proliferación de las universidades en cualquier rincón o “basural”, sin la calidad y las condiciones necesarias, con el aval de la ex Asamblea Nacional de Rectores, ha dado lugar a la fermentación y producción de la mediocridad y evacuación de profesionales de pésima calidad.
Para titularse en estas universidades “bambas”, que son las plagas de la educación superior, protegidos por el gobierno, basta matricularse y al cabo de 3 ó 5 años se hacen profesionales.
Allí están prohibidos que los “universitarios” recolectados sean desaprobados. “Los profesores”, en muchos casos que se titularon en cursos vacacionales en los pedagógicos, por ejercer la docencia sin título, son los que dirigen la formación de dichos universitarios, ridículamente llamadas universidades, que son filiales de entidades que tienen como sede la Capital, y que abundan en las provincias como plagas.
De los 100 por cientos de los alumnos asimilados o enganchados, el más del 80 por ciento solo acuden a cumplir con su asistencia haciendo actos de presencia. Hay un porcentaje de “conchudos”, que nunca asisten, pero al final todos se titulan, hayan asistido clases o no, desde luego pagando su mensualidad.
Estos “supuestos universitarios” aparte de ignorar las asignaturas de su competencia, son perfectos ignorantes en materia de investigación, por consiguiente son incapaces de formular, desarrollar y sustentar un trabajo de investigación, y desconocen por tal modo el proceso de diseño, elaboración y desarrollo de una tesis de titulación. Ante esta escalofriante realidad, a los egresados de las universidades “bambas” lo único que les queda es comprar sus tesis, donde existe un tremendo negociado.
Este tipo de fechorías no es ninguna novedad. La diferencia de lo que sucedía ayer, es que en la actualidad se ha prostituido bárbaramente, hasta donde están incursos las candidatos presidenciales, que sin empacho tiene la sinvergüencería de negar lo innegable.
Los gobiernos de Alan García y Alberto Fujimori fueron los más grandes promotores de la mediocridad y la titulación en serie de muchos profesionales, sobre todo en el campo pedagógico. Estos profesores titulados en serie, ahora enseñan en las universidades “bambas”.
Se ha llegado al extremo, que estas universidades “bambas” tengan facultades de medicina, odontología, ingeniería y otras especialidades, como si tratase de cualquier cosa, sin tener las condiciones elementales y profesionales de nivel como docentes, sino cualquier mamarracho.
Y lo más sarcástico y una ofensa a la educación universitaria es que los mentores de estas “casuchas”, estafas intelectuales, tengan una agrupación, para defenderse y atacar la legalidad, como se ve actualmente, en que está comprometidos algunos miembros del Tribunal Constitucional, que más parece ser el tribunal de los mafiosos, donde los corruptos tienen cabida y protección..