Por: Luis E. Forero Medina  Abogado/Especialista enSaluderecho

Las Dirección Regional de Salud (Diresa) y la Red de EsSalud fueron las perdedoras en las jornadas de vacunación del 7 y 8 de noviembre en todas las regiones del Perú, donde en algunos casos brillaron por numerosos problemas que impidieron en ocasiones vacunar a niños que no viven en la región donde por alguna circunstancia estaban allí o por no contar con seguro privado.

En algunas regiones los funcionarios encargados de la cruzada de vacunación llegaron más tarde de la hora prevista para iniciar la jornada, encontrándose con enormes filas de personas sin guardar un metro de distancia, que esperaban a sol y agua, a como estuviera el tiempo, a que los atendieran.

Sucedió igualmente que, al llegar las personas, muchas de las cuales venían de lejanos sitios, los puntos de vacunación estaban cerrados o los recibían en locales que nada tienen que ver con un punto de vacunación verdadero, o eran demasiado pequeños para las personas, presentándose aglomeraciones. Similares dramas vivieron quienes asistiendo a vacunarse se encontraron con la triste noticia que no había “stock para atender la alta demanda”.

También estuvo descoordinada en ciertos eventos la Policía Nacional de Perú (PNP) y las Fuerzas Armadas (FF. AA.), que según se afirmó no garantizaron el orden en el acceso de la población a los lugares de vacunación, como tampoco supervisaron el   protocolo sanitario de control de temperatura y desinfección de manos.

La Defensoría del Pueblo constató en algunos lugares de vacunación falta de agua, ausencia de artículos de limpieza en los servicios higiénicos, personal asistencial sin los implementos de bioseguridad completos y un desorden total en el tránsito vehicular en sitios aledaños a puntos de vacunación

A lo anterior se sumó una falta o tardía difusión de la campaña, lo que generó una gran confusión dentro de la población que desconocía y no había quién los orientara, respecto del punto de vacunación que les correspondía, quiénes iban a atenderse según la edad y con cuales vacunas; porque al comienzo dijeron que “todos podíamos vacunarnos y luego manifestaron que solo algunos”, informaron unos pobladores a la Defensoría del Pueblo.

En la primera Jornada Nacional de Vacunación, desarrollada el 10 y 11 de octubre, se logró inmunizar a un total de 394 003 personas; en esta segunda se esperaban vacunar a 362 308 personas. La próxima jornada masiva de vacunación se adelantará durante el mes de diciembre en más de 4 000 puntos a lo largo y ancho de todo el país; oportunidades en las cuales a los adultos y a los que registren   morbilidades se les aplica la vacuna contra la influenza y el neumococo, y los niños de 0 a 11 años, son inmunizados contra la difteria, tétanos, hepatitis B, rubeola, sarampión, entre otras enfermedades.

El Perú cuenta con uno de los esquemas más completos de vacunación en América Latina, que consta de 17 vacunas y protege hasta de 26 enfermedades, sostuvieron las autoridades.

@luforero4